El hígado es uno de los órganos más importantes de nuestro organismo, aunque no siempre le demos la atención necesaria. Se trata del gran encargado de la desintoxicación del cuerpo pues todas las sustancias que ingerimos pasan primero por el y luego van al torrente sanguíneo.
El hígado también se encarga de la producción de bilis, metabolizar el colesterol y los carbohidratos, sintetizar proteínas y de la desintoxicación sanguínea estudio de la revista Scielo.
Debido a que realiza estas importantes funciones, es vital cuidarlo para que tenga un desempeño adecuado.
Para esto te decimos algunos alimentos que ayudan a mantenerlo sano, de acuerdo con información del portal Hígado Graso, realizado por expertos hepatólogos, y del Centro de Investigación de Endocrinología y Nutrición Clínica de la Universidad de Valladolid.
1. Fibra
La fibra ayuda a controlar el peso y reducir niveles de colesterol lo que es bueno para tu hígado.
El sobrepeso contribuye a la aparición de hígado graso una de las enfermedades más comunes de este órgano y que más daños puede causar.
2. Frutos secos
Almendras y nueces son una gran opción para cuidar esta parte de tu organismo ya que aumentan el colesterol bueno y ayudan a reducir el malo. El hígado sintetiza el colesterol por lo que si debe procesar grandes cantidades puede llegar a enfermarse por el sobreesfuerzo.
3. Limón
Una de las propiedades del limón es que ayuda a neutralizar las grasas y esto es algo muy bueno para el hígado ya que reduce su trabajo de metabolizar el colesterol.
4. Agua
Si bien no es un alimento, beber agua es de las mejores cosas que puedes hacer por tu higado ya que ayudará a que éste cumpla con sus funciones de desintoxicación sin realizar tanto esfuerzo.
5. Semillas
Todo tipo de semillas son buenas para este órgano: linaza, girasol, ajonjolí, calabaza. Las semillas son una gran fuente de ácidos grasos esenciales, los cuales ayudan a mantener la salud del hígado.
6. Proteína vegetal
Cualquier reducción en el esfuerzo que el hígado debe realizar te lo agradecerá. En este sentido, la proteína vegetal (habas, lentejas, garbanzo) hace que trabaje menos que la proteína animal ya que es<strong> más fácil de procesar.
Por otro lado, el hígado produce la bilis y producirla en exceso hace que realice un esfuerzo innecesario, esto es lo que ocurre cuando consumes mucha carne (sobre todo roja) o comidas grasosas.
Con información de El Universal.