Hace más de media hora el presidente electo Andrés Manuel López Obrador subió su cuenta de Twitter una fotografía con el presidente Enrique Peña Nieto, el motivo: acordar los detalles de la toma de protesta del 1º de diciembre y “para agradecer sus atenciones”.
Fue una reunión de trabajo un tanto informal, en la casa de AMLO al sur de la CDMX, con comida de por medio, sin detallarse el menú, justo cuando corre la cuenta regresiva para que Peña Nieto deje el poder, el desmantelamiento del aparato de seguridad presidencial está en curso.
La noticia ha generado revuelo en las redes sociales, para algunos es muestra de civilidad política de ambos personajes, para otros una muestra del pacto político de impunidad que suscribe AMLO con su antecesor, sobre todo por la reciente entrevista con la periodista Aristegui en la que afirmó que no habrá persecución a los corruptos del sistema priista.