Luego de haber descalificado el proceso de elección de la dirigencia estatal del Partido Acción Nacional (PAN), al que comparó incluso con los fraudes del PRI de la década de los setenta, Jorge Lozano Soto informó desde sus redes sociales que no presentará ninguna impugnación.
“Hoy, he tomado una firme determinación: NO CLAUDICARÉ, NI RENUNCIARÉ COMO MILITANTE PANISTA, el amor hacia este gran institución es más grande que cualquier interés; por ello no presentaré acción legal en contra de los resultados de la desaseada y manipulada elección que se llevó a cabo el pasado 9 de diciembre; pero si dejaré en claro una cosa: no seremos comparsa de esta nueva dirigencia y seguiremos en pie de lucha defendiendo los valores de los miles de militantes que, al igual que tu, confiaban en el cambio”.
Lozano Soto perdió la elección frente al abogado Juan Francisco Aguilar, quien obtuvo en segunda vuelta 2,463 votos, mientras que el primero 1,962.
Desde antes de las elecciones, Lozano Soto, apoyado por ex alcaldes como Octavio Pedroza y Mario Leal, y el ex gobernador Marcelo de los Santos, entree otras figuras del panismo consideradas la “plana mayor”, denunció que el proceso era desigual porque Aguilar tenía todo el apoyo del dirigente Xavier Azuara, se le llegó a considerar el “favorito” por recibir el apoyo indebido de la estructura del partido.
Los otros candidatos perdedores, David Hernández y Juan Pablo Escobar se sumaron al rechazo del triunfo de Aguilar, a diferencia de Manuel Aguilar Acuña que se mantuvo en silencio tras darse a conocer los resultados oficiales.
El cambio de actitud de Lozano Soto se atribuye a la mediación de la dirigencia nacional del PAN, Marko Cortés.