Con juguetes como los Ksi Meritos, Neonatos, Mexican Pagüer y Chikiti Pun Taun, la marca mexicana Distroller ha desplazado a las grandes de la industria, tales como Little Mommy de Mattel y hasta Baby Alive de Hasbro.
Eduardo Figueroa, CEO de Distroller, aseguró que sus bebés son más populares entre las niñas que los de otras marcas, éxito que han logrado en los últimos cinco años.
“La categoría es nursery, que incluye cuidado de bebés, con todos los que son de cuidar y cargar, y según los datos que nosotros tenemos, somos el líder de ésta. La compañía tiene 14 años, lo logramos realmente rápido”, consideró el ejecutivo.
Destacó que el éxito de sus Ksi Meritos, se debe a que crearon una experiencia de compra diferente al del resto de las empresas. El auge de estos juguetes se dio prácticamente a partir de 2013.
“Entendemos muy bien lo que a las niñas les gusta, el rol de juego; a ellas les gusta cuidar muchas cosas. En el caso de los neonatos son extraterrestres, los quieren adoptar, juegan a lo que juega cualquier niño, pero nosotros lo hacemos de una forma muy particular, con una personalidad muy fuerte, es un rol de juego que combina muy bien la parte tradicional con un lenguaje más actual”, afirmó.
Tener un Ksi Merito es toda una experiencia que comienza en la tienda. Una enfermera explica a las niñas los cuidados que deben tener con sus muñecos, que se caracterizan por ser cabezones y de diferentes colores, como morado o rosa.
En el espacio donde se pueden comprar, también se pueden adquirir biberones, ropa, camitas y todo lo necesario para el mejor cuidado del neonato.
Aunque la popularidad de estos muñecos sigue creciendo, Figueroa expuso que no tienen previsto venderlos en otros puntos de venta que no sean tiendas departamentales o internet, pues de esta forma aseguran que la experiencia de compra sea única para sus clientes.
“El crecimiento viene por plaza, cuando cubrimos una tratamos de tener una o dos tiendas; a partir de ahí vemos si abrimos una tercera o nos vamos a otra plaza. El crecimiento también ha sido online; con la venta de productos en línea, lo puedes pedir y llega a cualquier parte”, dijo.
Uno de los grandes retos que enfrentan otras compañías es replicar la experiencia de marca, pues se requiere de un espacio amplio para exponer tanto a los muñecos como sus accesorios.
La popularidad de los Ksi Meritos ha hecho que se venda la versión pirata con sus accesorios en tianguis y mercados. Figueroa dijo que es difícil luchar contra los productos ilegales, pese a que han denunciado el problema.
“Ese mercado es muy hábil, es difícil que el ritmo legal avance suficientemente rápido para frenar esa acción, o ya se movieron o agarramos pocos. Creemos que el esfuerzo va del lado de la marca y la experiencia de marca. Quien los compra piratas no se está llevando la experiencia completa”, dijo.
Con información de Dinero en Imagen.