El número de muertos en el incendio de esta madrugada en París aumentó a diez, en un siniestro que las autoridades consideran intencionado y en el que una treintena de personas han resultado heridas, según los últimos datos facilitados por las autoridades.
Agregaron que todavía no se trata de datos definitivos, puesto que algunos heridos están graves y prosigue el registro del inmueble, situado en el oeste de la capital francesa y que quedó devastado por las llamas.
Las autoridades trabajan con la hipótesis de que se trata de un incendio intencionado.
Una mujer, de 40 años, habitante del edificio y con antecedentes por problemas psiquiátricos, fue detenida poco después de que se declarara el fuego, indicó el fiscal de París, Rémy Heitz.
En el momento actual, la tesis criminal es la que tiene más peso”, dijo a la prensa desde el lugar del suceso el fiscal, quien agregó que se ha abierto una investigación por incendio voluntario que ha provocado muertes.
Fuentes de la misma indicaron a la cadena de televisión BFMTV que la mujer estaba ebria en el momento de su arresto y que los vecinos habían escuchado una disputa vecinal antes del mismo.
Una vecina contó a la televisión que la detenida tenía la música muy fuerte y que otro habitante del inmueble, precisamente un bombero, golpeaba insistentemente a su puerta.
Según ese testimonio, la mujer le amenazó con provocar un incendio ya que él era bombero.
La sospechosa enloqueció y comenzó a lanzar objetos por la ventaja, poco antes de que se declarara el fuego.
A través de la red social Twitter, el presidente francés, Emmanuel Macron, manifestó sus condolencias a los familiares de las víctimas y su agradecimiento a los bomberos por su trabajo.
El fuego se declaró sobre la 01.00 de la madrugada (00.00 GMT) en el segundo piso de un edificio de los años 70, en buen estado, situado en la calle Erlanger, cerca del bosque de Bolonia, uno de los pulmones verdes de la ciudad.
Las llamas se extendieron de forma rápida en el inmueble por la parte del patio interior, lo que impidió que los bomberos pudieran desplegar sus escaleras mecánicas, algo que dificultó las labores de rescate.
Estas se llevaron a cabo mediante escaleras manuales, lo que permitió rescatar a medio centenar de personas, según el ministro del Interior, Christophe Castaner, que se trasladó al lugar de los hechos.
Seis de ellos resultaron heridos en esas labores, en las que participaron 250 bomberos, que consiguieron controlar las llamas a las 06.30 horas (05.30 GMT).
Con información de Excélsior.