Una mujer de 49 años de edad fue detenida por elementos de la Policía de Investigación (PDI) por la existir una orden de aprehensión en su contra por su probable responsabilidad en el delito de robo calificado cometido a una estética de la ciudad de San Luis Potosí.
Los hechos ocurrieron el 12 de abril del 2018 cuando la víctima se encontraba en su establecimiento ubicado en el barrio de Tequisquiapam, cuando arribó una persona del sexo femenino quien se dirigió a la encargada, solicitándole una cita para realizarse corte de cabello y otros servicios.
Ahí manifestó que eran de carácter urgente, haciéndole plática a la persona que la atendía y obteniendo más información del lugar como horarios y máquinas que manejan en el lugar; así una vez que obtuvo la cita, regresó para supuestamente realizarse su corte de cabello.
Al darse cuenta de que no había mucha clientela, sacó un gas lacrimógeno de sus pertenencias, rociándoselos en el rostro a los encargados de la estética y aprovechando que se encontraban descontrolados limpiándose la sustancia, los amagó con un arma blanca conduciendo a una de las personas al sanitario en donde los inmovilizó; una vez que logró someterlos se apoderó de diverso instrumental, así como productos de belleza de alto valor, retirándose no sin antes amenazar con ocasionar más daño.
La víctima solicitó la presencia de las autoridades y acudió ante el Agente del Ministerio Público para realizar la denuncia correspondiente.
De inmediato los agentes de la Segunda coordinación de Delitos Patrimoniales de la PDI en conjunto con la Unidad de Investigación Especializada en Robos a Industria, Comercio y Casa-Habitación, se avocaron a la integración de la carpeta respectiva, llevándola hasta el Juez de Control quien determinó que había los elementos necesarios para girar orden de aprehensión en contra de quien fue identificada como María “N”.
Los agentes de la Dirección General de Métodos de Investigación en funciones inherentes a su cargo obtuvieron datos de relevancia conociendo que la presunta se encontraba viviendo en el municipio de Huatulco en Oaxaca, por lo que se trasladaron hasta aquel lugar.
A través de los convenios de colaboración con esa entidad y luego de varios días de la labores de investigación lograron ubicarla.
Una vez identificándose como elementos en activos de la corporación, le hicieron saber el mandamiento existente en su contra, leyéndole sus derechos y realizando la documentación correspondiente, trasladándola hasta la Capital potosina para ponerla a disposición de la autoridad judicial.