Marcela Loyola
Comerciantes de la avenida Venustiano Carranza exigen al Ayuntamiento capitalino una explicación sobre la instalación de bolardos que impide que los automovilistas puedan estacionar y adelantaron que no permitirán que se implemente una ciclovía.
Los comerciantes José Luis Jasso y María Concepción Núñez, quienes en conjunto tienen tres negocios sobre Carranza, señalaron que están inconformes con la instalación de los postes fosforescentes, aunque desconocen si sea como parte de las medidas para evitar que la gente ande en la calle por la contingencia del coronavirus COVID-19, por lo que quieren una explicación al respecto por parte de las autoridades municipales.
El quejoso, José Luis Jasso señaló que ni siquiera los oficiales que se encuentran 24 horas custodiando los bolardos saben cuál es el fin de los mismos, “cuando les preguntamos sólo dicen: a nosotros nos dicen que digamos que estamos haciendo un estudio de aforo vehícular pero no sé qué es eso, así me han dicho”.
“¿Y aforo vehicular de qué? ¿De veras no conocemos el aforo vehícular de la avenida Venustiano Carranza? Una de las principales arterias viales de la ciudad ¿no conocemos el aforo vehícular? ¿No les basta con cerrar el domingo desde Uresti hasta no sé dónde para que paseen y saquen a sus perros teniendo parques? ¿No les basta cerrar los domingos para que camine por Carranza y espero que no sea una ciclovía porque si lo es, los vecinos estamos dispuestos a sentarnos en el arroyo vehicular, así como los pobres oficiales que vigilan los postes, el tiempo que sea necesario”, sentenció.
Expuso que están inconformes en que se haga una ciclovía, puesto que no hay espacio para la misma, solamente hay tres carriles y este proyecto ocuparía uno dejando sin lugar para estacionamiento o para que pasen los vehículos.
María Concepción Núñez manifestó que desde la instalación de los postes fosforescentes no dejan ni que se estacionen pese a que tienen que descargar mercancía, y como ya sufrieron con el reencarpatamiento y el cierre de la avenida los domingos, están inconformes con una ciclovía diaria, por lo que esperan que se trate de otro situación relacionada con la contingencia sanitaria que se está viviendo.
Además, lamentó que se tenga a agentes de tránsito cuidando los bolardos y no a la ciudadanía ni a los bienes, puesto que sobre Carranza hay locales solos que han sido vandaleados y hasta han roto los cristales sin que las autoridades tomen cartas en el asunto.
Reiteraron que solamente están solicitando una explicación de por qué se instalaron los conos o postes para tener conocimiento y en caso de que sea una ciclovía se puedan organizar entre todos los comerciantes para hacer un frente en contra.