Los balcones y puertas de Italia amanecieron este viernes 3 de abril con sábanas blancas llenas de mensajes de despedida para la doctora Lorena Quaranta, quien fue asesinada por su pareja luego de que el sujeto creyera que lo había contagiado de COVID-19.
Lorena fue asesinada en su hogar ubicado en la localidad italiana de Messina, el martes 31 de marzo, por su novio Antonio De Pace, quien fungía como enfermero en el Hospital Siciliano, donde Lorena de 27 años atendía a los pacientes con el virus.
De acuerdo a lo mencionado por medios italianos, la pareja discutió porque el hombre culpó a Lorena de haberlo contagiado del virus y la estranguló hasta terminar con su vida. Fue el mismo Antonio quien llamó a la policía y dijo que había matado a su novia porque lo contagió de COVID-19.
Cuando las autoridades llegaron al lugar encontraron a Lorena sin vida y a Antonio con cortes en las muñecas, por lo que fue trasladado a un hospital para recibir atención médica.
Tras realizar pruebas médicas a ambos se informó que ninguno era portador del virus. El hombre deberá enfrentar la justicia por el delito de feminicidio.
Por ADN40