[Javier Padrón]
Este jueves regresó a su oficina el secretario General de Gobierno, Alejandro Leal Tovías, tras 16 días de aislamiento y con una prueba negativa de COVID-19. El episodio fue confuso, primero se informó de manera oficial que se había contagiado, minutos después se dijo que solo era sospechoso.
No hubo ningún reproche de su parte hacia quienes dijeron que todo fue una simulación para evitar un mayor escándalo por la liberación de Sebastián “N”, conocido en las redes sociales como el “mono blanco”, tras los destrozos en el Congreso del Estado.
Ya tuvo suficiente tiempo para preparar una explicación oficial de los hechos y las omisiones en que incurrieron él mismo, el fiscal Garza y el secretario de Seguridad, Jaime Pineda. Los colectivos que defienden a la joven que fue vinculada a proceso sin pruebas, pronto pasarán a visitarlo.
Los colectivos dieron a conocer otra pista de la maquinación del vandalismo, todo fue planeado, hasta la quema de banderas, una fue llevada por un hombre que no tenía finta de anarquista y desde lejos vio todo con satisfacción, en el quiosco de la Plaza de Armas le entregó una bandera a una mujer vestida de negro.
Durante la ausencia de Leal Tovías continuó la inseguridad, las ejecuciones, algunas con crueldad extrema como las ocurridas en la colonia Julián Carrillo, y entre las novedades se encontró con la detención por fuerzas federales de Noé Israel Lara Belman, cofundador del Cártel de Santa Rosa de Lima, un terror en Guanajuato y avanzada del CJNG en la entidad, ninguna autoridad local sabía en apariencia de su estancia hasta que se lo llevaron.
La Sedena, por alguna extraña razón, no precisó en el boletín de prensa emitido ayer en cuál municipio fue detenido el también conocido como “El puma”.
La que sí está bien informada, es la diputada priista Bety Benavente al asegurar que San Luis Potosí se ha convertido en la “Cueva de Alí Baba” porque delincuentes peligrosos están viviendo aquí, “matando a diestra y siniestra”.
SIN FISCAL ANTICORRUPCIÓN
Hace más de cinco meses renunció Alejandro Vera Noyola a la Fiscalía Anticorrupción y sigue vacante. No hay prisa, se atravesó la pandemia, hay otras prioridades, no entienden algunos diputados que presionan al gobernador Carreras para que mande ya una terna, no es tarea fácil encontrar a la persona idónea, respetable, honrada y que rechace cualquier consigna.
Mientras la fiscalía no tenga autonomía —presupuestal, técnica y se separe de la FGE— no tendrá ningún caso designar a un nuevo titular, algunos diputados se acordaron que hay varias iniciativas en la congeladora y hubo la promesa de que pronto se pondrán a trabajar.