Jesús Ernesto de la Maza Jiménez, delegado de la Cruz Roja, presentó en la Fiscalía General del Estado una querella en contra su antecesor Óscar Segura Rodríguez y Juan Manuel López de Lara Castro, de la constructora Icaza, por presunto fraude por más de 40 millones de pesos.
Se asegura que los imputados actuaron con dolo, alevosía, ventaja y otras agravantes penales, causaron un daño patrimonial e incluso moral a la institución aprovechándose de la posición de privilegio en la que se encontraban.
Ambos denunciados realizaron maquinaciones para obtener un beneficio ilícito a través de la celebración de actos jurídicos que al parecer fueron simulados, contratación de obra inexistente y a precios exagerados, como fue el caso de la construcción de una escuela de fisioterapia en el Centro Universitario de la Salud por el que se erogaron 46 millones de pesos, monto muy superior a lo que realmente se hizo.
De acuerdo a lo trascendido en la Fiscalía General del Estado, el ex delegado Segura Rodríguez actuó con falta de seriedad, nada profesional, fue negligente, no quiso realizar de manera voluntaria la entrega de la delegación de la Cruz Roja.
Al revisar la situación financiera, fiscal, administrativa y jurídica de la delegación, que aún no concluye, se detectaron anomalías y malversación de recursos económicos y materiales.
A la Constructora Icaza de San Luis, S.A. De C.V., se la pagaron $46’449,173.78 por la obra de la Clínica de Fisioterapia y Rehabilitación Física, sin reunir los requisitos formales por la inexistencia de contrato y otros documentos necesarios en estos casos; se determinó que hubo el precio no corresponde con la obra física realizada e incluso primero se le pagó a López de Lara y luego se expidieron las facturas respectivas.