El gobierno de San Luis Potosí es corrupto, denunció Marcela Alemán, madre de una niña que fue abusada sexualmente en un jardín de niños en el municipio de Rioverde en el año 2017, y que a la fecha sigue exigiendo justicia debido a que no se ha castigado a las responsables, pese a tener las evidencias de su culpabilidad. Mientras que las autoridades y organismos en el Estado se niegan a dar un posicionamiento sobre el caso.
Medios nacionales, reportaron que Marcela Alemán permaneció la noche del miércoles 2 de septiembre amarrada a una silla de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), después de reunirse con la presidenta del organismo, Rosario Piedra, y gracias a videos difundidos por la misma Comisión, se ha confirmado que la mujer aún continúa en las instalaciones.
“Tuvimos la reunión con Rosario Piedra y me canalizó con un abogado que me pidió presentar la denuncia en San Luis Potosí, pero yo ya estoy harta de eso porque ellos son omisos y corruptos. Cómo es posible que yo sí me tenga que apegar a la ley cuando soltaron a la agresora de mi niña y no hay justicia” reprochó la madre.
Por ello se amarró a una silla en la CNDH para exigir justicia por su hija y que no le ocurra esto a ningún otro niño del país.
En San Luis Potosí las autoridades como la Comisión Ejecutiva Estatal de Victimas del Delitos y la Comisión Estatal de Derechos Humanos se negaron a dar un posicionamiento al respecto, y solamente enumerarán acciones pasadas como fue la recomendación 26/2018.
El presidente de la CEDH, Jorge Andrés López Espinosa se negó a dar entrevistas sobre el tema argumentando que se encuentra ocupado en diversas reuniones. Además, cabe descartar que constantemente víctimas se han quejado por el desempeño que ha tenido la Comisión.