La estrategia del Gobierno contra la pandemia del COVID-19 garantizó que ninguna entidad sufriera de falta de personal o insumos para enfrentarla, aseguró este martes Hugo López-Gatell, subsecretario de Salud.
“Es motivo de tranquilidad que en ningún momento de la pandemia se superó la capacidad del sistema de atención y esto se demostró en que hubo camas, no solo la cama física, sino el ventilador, las bombas de infusión, el equipo médico, las enfermeras, los enfermeros, los médicos, los inhaloterapeutas, el personal de laboratorio. Siempre estuvieron disponibles para atender a todas las personas que siempre lo han necesitado”, dijo en la presentación del informe ‘El pulso de la salud’.
Al respecto, López-Gatell subrayó la importancia de la reconversión hospitalaria dada la amenaza observada por el COVID-19 en varios países europeos y de América, donde la capacidad de los servicios de salud se vio rebasada.
La declaración del subsecretario contrasta con lo visto por algunas entidades, como el Estado de México. En esa entidad, por ejemplo, ocho nosocomios de seis municipios, entre los que estaba Ecatepec, se quedaron sin camas en mayo para atender a pacientes con el virus SARS-CoV-2.
Debido a la saturación provocado por el número de personas contagiadas en ese mes, el Hospital General ‘Dr. Darío Fernández’ del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), daba la prioridad de atención a las personas que consideraban que tenía “más posibilidades de sobrevivir”.
También en mayo, personal de salud protestó en la Ciudad de México, argumentando que, por medidas de austeridad, se reciclaban y se lavaban los cubrebocas N95 con los que laboraban.
Para atender la necesidad de insumos y equipos médicos, el Gobierno de México estableció puentes aéreos con China, y recibió ventiladores gracias a un acuerdo con el Gobierno de Estados Unidos, entre otras adquisiciones.
Con información de El Financiero.