Jorge Ramírez Pardo
México es uno de los países cuya evocación a sus muertos en distintos confines de su territorio celebra desde antes de la Conquista ritos festivos en honor a sus muertos. Por tanto, es una tradición de los pueblos originarios o indígenas con significativa pregnancia en territorios mestizos y urbanos.
Este año la contingencia sanitaria provocada por el Covid 19 obligó al cierre de la mayoría de los panteones del país y convirtió al ritual en un ejercicio de predominio virtual sin renunciar al ingenio y creatividad.
En Palacio Nacional, con la nomenclatura “Una flor para cada alma”,se instalaron 20 ofrendas de pueblos indígenas originarios del oriente y costa del Golfo de México, del norte y centro del país, del occidente y sur, y sur-sureste. Para su inauguración y muestra virtual al país, a través de canales televisivos estatales y sitios informativos en portales de Internet, hubo una ceremonia presidida por el primer mandatario Andrés Manuel López Obrador, su esposa Beatriz Gutiérrez Müller, y los indígenas oaxaqueños, Adolfo Regino, titular del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas y una chamana, quien durante todo el tiempo de recorrido por los altares, incensó a la comitiva con un sahumerio rústico. Los sahumerios tienen sentido ritual y curativo, son un aliado para alcanzar el bienestar y recuperar la armonía que tanto buscamos en tiempos de crisis y estrés.
AMLO, luego de una breve liturgia y ser “barrido” por una indígena oaxaqueña comentó: “A partir de hoy se inician tres días de luto nacional, dedicados a recordar a todos nuestros difuntos y en especial a quienes han perdido la vida a causa de la pandemia del COVID-19, con esta ofrenda apegada a costumbres que vienen de lejos recordamos a los difuntos niños”.
El recorrido
En el recorrido por los 20 altares de muertos de palacio nacional, el pequeño séquito era recibido con un saludo de bienvenida, una breve explicación del contenido y significado de cada ofrenda –excepcionalmente alguna petición- en la lengua indígena de cada grupo étnico representado. Luego, la misma persona o un acompañante repetían lo dicho en español.
Las 20 ofrendas indígenas “Un altar para cada alama”, no pueden ser visitadas de manera presencial, pero, el recorrido aquí mencionado puede ser visto en el siguiente sitio de Internet: https://www.youtube.com/watch?v=lAmLLMD7jbM
En todos los altares el presidente agradeció la presencia de los indígenas, les decía este Palacio nacional es su casa, la de los grupos originarios y del Pueblo de México.
Si había alguna solicitud de apoyo, el mandatario ofrecía atenderla a través de la interlocución de Adolfo Regino
Durante el recorrido a los altares, una orquesta de cámara integrada por indígenas oaxaqueños, estuvo interpretando melodías. La más recurrente de ellas fue “Dios nunca muere”, vals compuesto en 1868 por el también oaxaqueño Macedonio Alcalá. Casi un siglo después, en 1955, el compositor Vicente Garrido Calderón le escribiría una letra que se popularizaría.
Muere el sol en los montes
con la luz que agoniza,
pues la vida en su prisa
nos conduce a morir.
Lo contenidos temáticos
A pesar de la diversidad multicultural e idiomática de los diversos grupos y sus respectivas lenguas, hay un común denominador predominante, cuyos contenidos temáticos y simbólicos predominante son:
- La celebración inicia el 28 de octubre
- Primero se da la bienvenida a los niños difuntos y luego a los adultos.
- En el altar hay ofrendas producto de la cosecha reciente de frutos de la tierra y platillos regionales que degustaron en vida los difuntos.
- Para los niños hay dulces y juguetes.
- Las luminarias son guías para ayudar al difunto a volver a visitar a sus seres queridos, quinees lo recuerdan.
Las regiones
Mixtecas y Huasteca Potosina
Guachila, comunidad de Huauchinago, Puebla.- Arcos de la abundancia y la bondad. Decimos al pueblo de México los pueblos indígenas están vivos, representan la vida y la abundancia para nacer, vivir y morir. La sabiduría como pueblos indígenas, somos raíces, tenemos palabra y tenemos vida. Gracias por escucharnos y tomarnos en cuenta.
Mixteca.- En el altar hay totopos con maíz nuevo y memelas para el camino de los difuntos; flores para el alma, luces para guía y una cruz porque en el más allá están con dios y puedan regresar
Cultura Ténec huasteca de San Luis Potosí.- Sabemos que es una fiesta de nuestros pueblos originarios. México es multicultural y grande y cada pueblo festeja a su manera la venida de nuestros difuntos.
Pero no importa saber
que voy a tener el mismo final
porque me queda el consuelo
que Dios nunca morirá.
Yaquis de Sonora y otomíes de Guanajuato
AMLO.- Ester palacio es de ustedes, de los pueblos yakis y de todos los pueblos originales de México Y vamos a cumplir con el plan de justicia a los pueblos yakis.
Guanajuato otomí: No tenemos el apoyo del Estado, le pedios que nos escuche y el trato directo sea con usted.
Voy a dejar las cosas que amé,
la tierra ideal que me vio nacer,
pero sé que después habré de gozar
la dicha y la paz que en Dios hallaré.
Tarahumaras de Chihuahua y huicholes de Durango
Tarahumaras.- Representamos el alatar de la cultura Rarámuri
Huicholes.- Hemos luchado defendiendo nuestras tierras de las que nos han despojado… seguimos en pie de lucha.
Sé que la vida empieza
en donde se piensa
que la realidad termina.
Pueblos náhuatl, purépechas, tlapanecos y amuzgos
San Antonio Tecómetl, de Milpalta. Ahí las familias se juntan junta una hoguera para esperar a los muertos y les ponen una estrella iluminada para iluminar a los muertos.
Resaltan su variada gastronomía y dicen tener el mejor pulque de México
AMLO.- Hicimos el compromiso con la maestra Raquel Sosa para abrir una universidad, y se va a cumplir. Ahí se estudiará la cultura náhuatl y de los pueblos originarios.
Purepechas de Santa Fé de la Laguna, junto al Lago de Pátzcuaro.- Estamos agradecidos por la invitación y expresar nuestras tradiciones. El altar está dedicado al general “tata” Lázaro Cárdenas.
Amuzgos y tlapanecos de Guerrero.- Nos sentimos orgullosos de estar aquí y estamos admirados con esto. En nuestros altares hay 12 ramos, representan los meses de espera. Los 4 horcones representan los puntos cardinales. Resaltan también su comida, vestuarios y la danza Machomula para ir a recibir a los fieles difuntos.
AMLO.- Siempre los visitaremos en la Montaña, en la Costa y Tierra caliente.
Sé que Dios nunca muere
y que se conmueve
del que busca su beatitud.
Oaxaca multiétnica
Zapotecas.- Homenajeamos a nuestros héroes víctimas del Covyd 19. A los difuntos los recibimos a las 3 de la tarde con tañer de campanas y cohetones.
Mazatecos.- Dos arcos que representan la vida. Hay 40 días de anticipación y en días de cosecha. Hay jóvenes disfrazados que danzan.
Mijes de Alotepec.- Recibimos el programa “sembrando vida” de gran ayuda a los jóvenes.
AMLO.- Ustedes son ejemplo de organización comunitarias.
Sé que una nueva luz
habrá de alcanzar
nuestra soledad
y que todo aquel
que llega a morir
empieza a vivir
una eternidad.
Chiapanecos y yucatecos
Oxchuc, Chiapas.- Agradecemos que un presidente de la República nos invite. Como indígenas nos tiene miedo un presidente porque tal vez no sabemos hablar bien o porque olemos a campo.
Las Margaritas, Chiapas.- Nuestro altar es con 4 escalones. Para catequistas, difuntos, niños y todos.
Mayas de Yucatán.- En el altar hay unc Cruz verde. Divide dos espacios, los que se portan bien, se van al cielo, los que se portan mal al Inframundo.
Muere el sol en los montes
con la luz que agoniza,
pues la vida en su prisa
nos conduce a morir.