Javier Padrón
Es cuestión de horas la nominación del candidato de Morena a la gubernatura vía encuesta —para disfrazar el dedazo presidencial—, nadie ha dado testimonio de la encuesta, el líder nacional Mario Delgado presumió que sería cara a cara, y no hay quien diga que ya fue encuestado.
Algunos medios reportan como finalistas a Juan Ramiro Robledo y Leonel Serrato, dejando fuera al huasteco Adrián Esper, confrontado con el gobernador Carreras, es el más incómodo de todos los precandidatos, propuso la legalización de la mariguana en zonas indígenas, castigo a la corrupción, eliminar el gasto excesivo en publicidad oficial en los corporativos mediáticos “prianistas” y promete gobernar desde su carísima bicicleta como lo hizo en Ciudad Valles.
El último en aparecer en la contienda, Juan Ramiro, podría ser el ungido, es lo que se escucha como un coro en los círculos morenistas; se siente confiado, no hizo un gran esfuerzo, su precampaña fue de bajo perfil, algunos videos, entrevistas; con escasas visitas al interior del estado y ni una concentración por el pretexto de la pandemia; como si ya todo estuviera definido a su favor, de otro modo seguiría de magistrado para concluir su carrera pública sin sobresaltos.
Serrato hizo lo que sabe hacer, revestir de grandilocuencia cualquier declaración insulsa, burlarse de los adversarios y darle un toque teatral, épico, a su proyecto con los “defensores de la patria”, que no son otra cosa que los “servidores de la nación”, por lo que fue denunciado por el aspirante José Antonio Lorca por uso de recursos humanos y materiales del gobierno federal para fines electorales, lo cual ya se tipificó como delito grave.
Tomás Rosales, militante fundador de Morena y en espera de justicia por su hijo asesinado por el crimen organizado, le dio a Leonel una repasada en una carta este fin de semana de su rentable relación con los gobiernos priistas, su doble discurso. Leonel es apoyado sin duda por el superdelegado Gabino Morales y la estructura de la Secretaría del Bienestar, no será el candidato a gobernador, no ganaría, aun le falta trecho por recorrer y dominar sus impulsos, aceptaría de nuevo la candidatura a la alcaldía.
El senador Primo Dothé se derrotó a sí mismo, sus operadores lo abandonaron al confirmar que es un flojo, realmente no estaba interesado en la candidatura, en entrevistas y eventos nunca dijo algo que ameritara las ocho columnas, evidenció sus compromisos con los grupos de poder, ni siquiera reivindicó a los pueblos indios de la entidad.
El único de los que pone en duda la transparencia de la encuesta, es el diputado federal Ricardo Delsol Estrada, los demás, los que solo hicieron bola para ver qué les tocaba, están en espera del resultado sin hacer ruido. En Zacatecas hubo gritos de fraude, el clan Monreal se afianza, la democracia en Morena está en construcción.
OCTAVIO SE PERFILA
En el PAN la situación se puso al rojo vivo. Sonia Mendoza y Xavier Nava hacen campaña en varios municipios en contra del PAN, de la dirigencia estatal, firmaron su derrota y como testigo de honor estuvo Alejandro Zapata, ejemplo vivo de cómo se puede autodestruir un líder panista. Perdió el decoro: su apoyo a Nava pasa por los cheques millonarios que ha cobrado como asesor legal del ayuntamiento, es una adhesión comprada.
En contraparte, su propia hija Marcela se sumó a la campaña de Octavio Pedroza, el favorito a ojos de Sonia y Xavier; y Marco Gama no se baja de la contienda; mientras que la diputada federal Josefina Salazar le dio su apoyo a Nava, “me sumo a un proyecto de unidad (sic) por San Luis Potosí”, ella quiere ser candidata a la alcaldía y desestima la denuncia en su contra por utilizar una empresa fantasma.
No se ve ahora una desbandada en el PAN hacia el bando navista, una fractura mayor en el partido sí reduciría sus posibilidades de ganar la gubernatura. Como en el cadavérico PRD ven ya lejano que Nava sea el candidato del PAN, Jesús Zambrano alegó en su defensa que es el mejor posicionado “de acuerdo a estudios demoscópicos que hemos conocido recientemente”, sin mencionar uno solo para sustentar su afirmación.
El PRD no respeta el espíritu y términos de la coalición derechista, se entromete en la vida interna panista. Lo único que puede salvar a Nava de su declive y de paso a su escudera Sonia, es una imposición de Marko Cortés, lo cual sería catastrófico para el panismo potosino, serían tres elecciones perdidas de manera consecutiva por falta de consensos internos.
CABILDO, A PUNTO DEL QUIEBRE
Sigue el jaloneo en el ayuntamiento capitalino por los planes de desarrollo urbano que urge aprobar a la brevedad por las fiestas navideñas y tranquilidad de los grandes fraccionadores. El alcalde interino Alfredo Lujambio y la síndica Nayeli Vázquez Martínez aseguraron por separado que está todo listo para sesionar y presentar los dictámenes respectivos, lo que falta es voluntad de las regidoras Karina Benavides y Verónica Rodríguez. Esta les reviró sin sutilezas, solo tienen un interés económico y no velan por la ciudad, “cuidan el bolsillo de unos cuantos”.
El regidor del PVEM, Eloy Franklin, habló de que es posible que se recurra a la compra de votos para aprobar los planes de desarrollo urbano y refirió los conflictos de interés del tío de Nava, Horacio Sánchez, como abogado del Grupo México y del secretario particular de Nava, Pablo Zendejas, cuya familia promueve un proyecto residencial en San José de Buenavista. Esas son minucias, dicen con jactancia mero arriba.