Una reforma a la Ley de Coordinación Fiscal permitirá a municipios y alcaldías contar con recursos para construir panteones como espacios dignos para el descanso final de nuestros muertos en tiempos de pandemia, planteó la diputada federal del PRI, Sara Rocha Medina.
“Así como se implementó la reconversión de hospitales, la ampliación de la capacidad hospitalaria, la adquisición de ventiladores, la compra de equipo de bioseguridad médica, la contratación de más médicos, es también necesaria la adquisición de nuevas áreas en los que se pueda dar una ubicación final a los cuerpos o restos de las personas que fallecieron”, expuso.
La iniciativa de ley propuesta por la legisladora de San Luis Potosí y a la que se sumaron diputados federales del Grupo Parlamentario del PRI, establece una adición al artículo 33 de la Ley de Coordinación Fiscal, con la finalidad de que se destinen recursos públicos, a través del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social (FAIS), a la inversión de infraestructura para el Servicio Público de Panteones.
El ordenamiento legal vigente deja fuera a las autoridades municipales de usar recursos del Ramo 33 para ampliar cementerios o construir nuevos. La reforma propuesta busca atender la demanda de tumbas para la disposición final de restos humanos que ha surgido, desde junio del 2020, en el ámbito municipal, en razón de las magnitudes de la pandemia del COVID-19.
“Debemos ser sensibles a las necesidades de la población, revalorar y fortalecer el papel de las autoridades y comunidades locales, en colaboración con la sociedad civil y el sector privado. Es un hecho que los panteones municipales están llenos y se requiere habilitar nuevos espacios físicos en los que se puedan enterrar a los muertos”, señaló Rocha Medina.
Finalmente, la legisladora recordó que la escasez de recursos no justifica actos de discriminación y así como el FAIS entrega recursos para agua potable, alcantarillado, drenaje y letrinas, urbanización, electrificación rural de colonias pobres, mejoramiento de vivienda, infraestructura básica del sector salud y educativo, también puede aportar para la ampliación de cementerios o la construcción de nuevos.