Marcela Loyola
Militantes de Morena irrumpieron en la rueda de prensa del senador suplente Alejandro Rojas Díaz Durán, a quien le entregaron un escrito dirigido al presidente nacional de Morena, Mario Delgado Carrillo, para expresarle su rechazo por la imposición de Mónica Liliana Rangel Martínez como candidata a la gubernatura de San Luis Potosí y de Xavier Nava Palacios como candidato a la alcaldía capitalina.
Fue al inicio de la conferencia de prensa cuando Alejandro Rojas pidió una disculpa a los periodistas agredidos el sábado afuera de un evento privado de la candidata Mónica Rangel, y aseguró, sin pruebas, que fueron grupos infiltrados del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y del municipio de Soledad los que comenzaron las agresiones, pero en eso los militantes de Morena llegaron a desmentirlo.
El representante del Frente Unidos contra la Imposición, Impunidad y Corrupción, Carlos Garrigos Esparza llegó afirmando que las bases morenistas e integrantes del frente fueron los que se manifestaron ese día de forma pacífica, debido a que Mónica Rangel no es morenista solo porque se ponga el chaleco del movimiento..
En la carta dirigida a Mario Delgado se le acusa de estar destruyendo a la militancia de San Luis Potosí y otros estados, y lo consideran como un traidor de la 4T, ya que con imposiciones están destruyendo toda la lucha que se inició con el ahora presidente Andrés Manuel López Obrador, pero puntualizó que aún están a tiempo de quitarles la candidatura a Rangel Martínez y Xavier Nava.
Carlos Garrigos le dijo a Alejandro Rojas que se abstenga de venir a amenazar a la militancia de que la va expulsar de Morena y reprobó que el pasado sábado le aventaron la camioneta, afirmando que fueron los brigadistas de Rangel Martínez los que agredieron.
Por su parte, la aspirante a diputada federal, Roxana Hernández reiteró que están en contra de las imposiciones de Mónica Rangel y de Xavier Nava, solicitando que le quitaran la candidatura, sobre todo porque desde la dirigencia nacional desconocen el contexto que se vive en San Luis Potosí y piden que una verdadera morenista encabece la candidatura.
Después de escuchar a los manifestantes, Díaz Durán trato de continuar su rueda de prensa, pero constantemente era interrumpido y pidió respeto, pero le replicaron que “la falta de respeto era para la militancia al imponer a una priista en la candidatura”, por lo que se solicitó a sus colaboradores que se la llevaran a tomar un café.
Ante las constantes interrupciones, se llamó al personal de seguridad del hotel donde se realizaba la rueda de prensa, en un principio de negaron a salir argumentando que querían escuchar lo que se decían en la rueda de prensa, pero finalmente salieron por su propia voluntad manifestando que no querían escuchar mentiras.