El diputado por el PVEM, Edgardo Hernández Contreras, señaló que son muy lamentables, y preocupantes, las declaraciones del mandatario Andrés Manuel López Obrador, por el trabajo realizado por el juez federal Juan Pablo Gómez Fierro, de origen potosino, que otorgó un amparo contra la reforma de la ley de la industria eléctrica.
Reprobó las amenazas a un poder autónomo, como lo es el Poder Judicial de la Federación, “en total incongruencia, toda vez que el discurso popular del Presidente, es proteger a la democracia, y sea él mismo quien la traiciona”.
El legislador pidió hacer un poco de memoria, en el famoso juicio constitucional del Juez John Marshall en la controversia, Marbury contra Madison, en EUA, de 1803, donde la Corte sentó las bases, adoptadas en Latinoamérica, para un control judicial a través de la Constitución, a los actos del mismo poder, pues con esto se garantiza a la población, que también son justiciables, y que un poder judicial los defenderá de los abusos de otro poder, una perfecta armonía para garantizar el Estado de Derecho.
“En el caso particular del juzgador, Juan Pablo Gómez Fierro, quien además es un potosino valiente, en pleno ejercicio de sus facultades otorgadas en el ejercicio de su jurisdicción, empleo ese control otorgado a través de la justicia, fijó límites a las actuaciones gubernamentales obradoristas, el cual es totalmente legítimo, y es en la legalidad donde se debe determinar si la reforma de la ley eléctrica perjudica o beneficia a la población”, puntualizó.
Hernández Contreras dijo que “nos encontramos ante un mandatario intolerante, represor, que incita a la disolución social, a través del populismo que no comulga con la verdadera democracia, denostando un poder autónomo, y exhibe su frustración al no materializar sus intereses”.
Ante esto, el diputado dio total apoyo al funcionario judicial federal Juan Pablo Gómez Fierro, en pro de la democracia, “no como un tema de elegir gobernantes, sino como sistema político que defiende la soberanía del pueblo y el derecho del pueblo a elegir y controlar a sus gobernantes, en total respeto de la división de poderes, que dicho sea de paso, el atropellamiento lo vemos también aquí en San Luis Potosí, “con un gobernador mediocre y tibio como Juan Manuel Carreras, quien se entromete en los poderes Judicial y Legislativo, para lograr sus pretensiones a costa de mancillar la soberanía”.