Canadian Pacific Railway acordó comprar Kansas City Southern por 25 mil millones de dólares, con el propósito de crear una red ferroviaria de más de 30 mil kilómetros que unirá a Estados Unidos, México y Canadá.
La transacción le da a Canadian Pacific acceso a la extensa red ferroviaria del Medio Oeste, en Estados Unidos, de la compañía con sede en Kansas City, Missouri, que conecta granjas en Kansas y Missouri con puertos a lo largo del Golfo de México.
También le daría alcance a México, que representó casi la mitad de los ingresos de Kansas City Southern el año pasado, y crearía la única red que atraviesa los tres países de América del Norte.
“Esta transacción será transformadora para América del Norte”, dijo Keith Creel, presidente y director ejecutivo de Canadian Pacific.
Creel será el director ejecutivo de la nueva compañía, que tendrá su sede en Calgary, y se espera que permanezca al mando hasta al menos principios de 2026, según un comunicado emitido por ambas empresas.
La entidad combinada, que se llamará Canadian Pacific Kansas City, o CPKC, tendrá ingresos por alrededor de 8 mil 700 millones de dólares y casi 20 mil empleados.
El acuerdo se produce cuando se espera que el comercio entre las tres naciones se recupere bajo la Administración de Biden.
Apenas unos días después de su toma de posesión, el Presidente de Estados Unidos, Joe Biden, habló con los líderes de Canadá y México, sus primeras llamadas con contrapartes extranjeras, donde se discutieron temas desde el comercio hasta el cambio climático.
México es un proveedor fundamental de automóviles, productos electrónicos y alimentos y un importante cliente de cereales, combustibles y bienes de consumo, vínculos que probablemente se fortalecerán con la aprobación en julio del pacto comercial entre Estados Unidos, México y Canadá.
La red de Kansas City que une las ciudades y puertos industriales más grandes de México con el Medio Oeste de los Estados Unidos también se posicionaría para beneficiarse si la pandemia del coronavirus y los lazos desgastados entre Estados Unidos y China incitan a las empresas a trasladar la fabricación con salarios más bajos de Asia a América del Norte.
“He estado pendiente de KCS durante bastante tiempo”, dijo el director ejecutivo de Canadian Pacific Railway, Keith Creel, en una entrevista telefónica. “Extendemos nuestro alcance para nuestros clientes a través de Estados Unidos y México, y al mismo tiempo, KCS puede hacer lo mismo desde México hasta destinos en Estados Unidos y Canadá”.
La combinación, la mayor compra de un activo estadounidense por una empresa canadiense desde 2016, proporcionaría una solución de transporte para los fabricantes que buscan traer fábricas de regreso a América del Norte después de que la pandemia expuso los riesgos de depender de cadenas de suministro en el extranjero, dijo Creel.
La fusión tiene un “impacto ambiental convincente y poderoso” al atraer más carga de camiones al ferrocarril, que es aproximadamente cuatro veces más eficiente en el consumo de combustible, dijo.
Los inversores de Kansas City recibirán 0.489 de una acción de Canadian Pacific Railway y 90 dólares en efectivo por cada acción que posean, valorando las acciones en 275 dólares cada una, un 23 por ciento más que el cierre récord del viernes, según un comunicado de ambas compañías el domingo.
Juego comercial
La transacción sería la mayor compra canadiense de un activo estadounidense desde que Enbridge acordó comprar Spectra Energy por unos 28 mil millones de dólares hace cinco años, según datos compilados por Bloomberg. Ese trato se cerró a principios de 2017.
El acuerdo se produce cuando se espera que el comercio entre las tres naciones se recupere bajo la administración de Biden. Apenas unos días después de su toma de posesión, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, habló con los líderes de Canadá y México, sus primeras llamadas con contrapartes extranjeras, donde se discutieron temas desde el comercio hasta el cambio climático.
México es un proveedor crucial de vehículos, autopartes, productos electrónicos y alimentos y un importante cliente de granos, combustibles y bienes de consumo, vínculos que probablemente se fortalecerán con la aprobación en julio del pacto comercial entre Estados Unidos, México y Canadá.
Como parte de la transacción, Canadian Pacific Railway emitirá 44.5 millones de nuevas acciones, que se financiarán con efectivo disponible y alrededor de 8.6 mil millones de dólares en deuda.
La deuda de Canadian Pacific Railway aumentaría a alrededor de 20 mil millones de dólares y el apalancamiento aumentaría a aproximadamente cuatro veces las ganancias antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización. El flujo de efectivo libre de alrededor de 7 mil millones de dólares al año del ferrocarril combinado ayudaría a Canadian Pacific Railway a reducirlo a 2.5 veces en tres años.
Canadian Pacific Railway espera impulsar las EPS diluidas ajustadas en el primer año completo después de completar el acuerdo y luego generar una acumulación de dos dígitos. La combinación dará como resultado alrededor de 780 millones de dólares de ganancias de eficiencia durante tres años, de las cuales aproximadamente tres cuartas partes provienen del aumento de las ganancias.
Sin recortes de trabajo
No habrá reducciones en la fuerza laboral, dijo Creel en la entrevista, y predijo que la fusión resultará en ganancias laborales a medida que crezcan las ventas.
Canadian Pacific Railway presentará la solicitud de fusión ante la Junta de Transporte y Superficie de Estados Unidos el lunes y comenzará el proceso de creación de un fideicomiso que mantendrá las acciones de Kansas City Southern mientras la aprobación esté pendiente, dijo Creel. Las empresas esperan que se complete una revisión por parte del STB a mediados de 2022.
“La combinación Canadian Pacific-KC Southern tiene la mayoría de los sellos para la aprobación regulatoria”, dijo Lee Klaskow, analista de Bloomberg Intelligence. “Seguirá siendo el ferrocarril de Clase I más pequeño y la falta de superposición y la extensión de las redes combinadas no impedirá la competencia, en nuestra opinión, y puede resultar en una mayor fluidez”.
Agregó que Kansas City Southern está exento de las “reglas de fusiones de alto obstáculo” del regulador.
Aún así, podría haber otros obstáculos. El intento hostil de Canadian Pacific Railway de adquirir Norfolk Southern Corp. a partir de 2015 se derrumbó en medio de una lluvia de críticas de los transportistas, incluidas las de United Parcel Service FedEx e incluso el Ejército de los Estados Unidos, Que utiliza los rieles para transportar equipo militar. Creel calificó el acuerdo de “simple y pro-competencia” porque las dos redes no se superponen.
“Proporciona un impacto positivo para todas las partes interesadas, incluido el interés público”, dijo Creel. “Los clientes existentes pueden extender su recorrido y llegar a nuevos mercados, así como a nuevos clientes que esta red atraerá naturalmente”.
Un objetivo repetido
Kansas City Southern, el más pequeño de los ferrocarriles de carga Clase I de Estados Unidos,
En septiembre, Dow Jones informó que la compañía rechazó una oferta de 20 mil millones de dólares de Blackstone Group Inc. y Global Infrastructure Partners. Los rumores de Kansas City Southern como un objetivo de adquisición se han arremolinado durante años, especialmente después de que Canadian National Railway completara la compra del Illinois Central Railroad en 1999 que le dio acceso a los puertos en el Golfo de México de Estados Unidos
Creel y el director ejecutivo de Kansas City Southern, Pat Ottensmeyer, dijeron que comenzaron las conversaciones sobre la fusión a fines del año pasado. Las dos compañías, que han trabajado juntas durante años con intercambios de vagones, decidieron que era el momento adecuado, especialmente después del renovado acuerdo comercial entre Estados Unidos, México y Canadá que reemplazó al TLCAN, dijo Ottensmeyer.
“Esta es una combinación que tiene mucho sentido dada la falta de superposición y las oportunidades como el USMCA presentes para las perspectivas del ferrocarril y la huella que esta compañía tendrá en términos de una red norteamericana incomparable”, dijo Ottensmeyer en la entrevista telefónica.
BMO Capital Markets y Goldman Sachs son asesores financieros de Canadian Pacific, mientras que Bank of America y Morgan Stanley asesoran a Kansas City Southern.
Con información de El Financiero