Javier Padrón
La idea del debate del CEEPAC con temática indígena entre candidatas y candidatos a la gubernatura, no fue de ese organismo sino de representantes de las etnias Náhuatl y Tének, no de la presidenta Laura Fonseca que solo sabe quejarse de la falta de presupuesto, ni de los consejeros “ciudadanos” y representantes partidistas.
De lo que nadie habló en el debate ni se incluyó en las preguntas, fue la sentencia del Tribunal Electoral Estatal de SLP para que dentro de tres años se realicen elecciones de ayuntamientos en los municipios con población de mayoría indígena, así como de diputaciones locales, a través de los usos y costumbres de las culturas Tének, Náhuatl y Pame.
El ejemplo de Cherán, municipio purépecha en resistencia de Michoacán, está permeando en los pueblos originarios de San Luis Potosí, y en las elecciones de unos diez municipios podrán prescindir de los partidos políticos y de candidatos ciudadanos con grandes fortunas, así como del oneroso y excluyente CEEPAC, eso sí será un verdadero cambio de la situación actual de los indígenas potosinos.
UN ANTI-PEJE PROMUEVE A CANDIDATO DE MORENA
El otrora respetable defensor de los derechos humanos Emilio Álvarez Icaza (y) Longoria (tres apellidos para que no quede duda de su noble origen), senador “ciudadano” que llegó con el registro de MC y se destaca por su oposición golpista al Presidente AMLO y su partido Morena, vino a brindar su apoyo a su amigo Xavier Nava, candidato precisamente de ese innombrable partido para reelegirse en la alcaldía capitalina.
La contradicción de Álvarez Icaza (y) Longoria es más que evidente y su presencia oportunista solo confirma que la campaña de Nava está perdida.
Con un desplegado suscrito en las primeras posiciones por intelectuales que sirvieron de encubridores de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto cuyo legado es la corrupción y el abuso de poder, Álvarez Icaza (y) Longoria pretendió ajustar cuentas a Enrique Galindo y de paso a Ricardo Gallardo, y se le revertió porque Nava violó derechos humanos de manera sistemática y reiterada, acumuló recomendaciones de la CEDH que se negó a cumplir y en los casos que lo hizo, fue con reservas.
Álvarez Icaza (y) Longoria nunca entenderá la realidad potosina, vino en papel de porrista abyecto de un candidato que solo ostenta un apellido ilustre y está reprobado en materia humanista, ¿cómo ponerlo de ejemplo frente a Galindo y Gallardo?
Lo que no sabe o finge ignorancia, es que más que desplegados y conferencias de prensa, lo que necesita y le urge a Nava es dinero para su campaña, no importa de donde venga, ya no tiene el mismo financiamiento de hace tres años, se requiere para repartir más despensas y estufas en colonias pobres, pero sobre todo para comprar votos el seis de junio.
Ese es el candidato de Morena que respaldan Álvarez Icaza (y) Longoria, Sergio Aguayo, Javier Sicilia y Mariclaire Acosta.