La consulta popular no es más que un capricho del Presidente Andrés Manuel López Obrador, y le costará a los mexicanos más de 528 millones de pesos, dijo el diputado Rubén Guajardo Barrera.
La ciudadanía ha sido encuestada y más del 59 por ciento, refiere estar en desacuerdo con este mecanismo que busca que los ex presidentes y ex funcionarios públicos no cuenten con fuero político y pueden ser investigados y procesados en cualquier momento.
El coordinador de la fracción parlamentaria del Partido Acción Nacional, PAN, en el Congreso del Estado de San Luis Potosí, lamentó que el más afectado en este proceso sea el ciudadano, porque este procedimiento le costará mucho a los potosinos.
“Presuntamente quiere escuchar la voz del pueblo, sin embargo en la práctica se observa como un sistema autoritario, porque debe ser la gente quién impulse este tipo de procesos y no un jefe de nación.
El presidente adoptó esta medida de potencias como la europeas, donde ha quedado comprobado que este tipo de consultas ciudadanas no son una varita mágica, incluso se pierde más con ellas porque en democracias participativas como la de Suiza, España y California sólo salen a votar entre 8 y 15 por ciento de de su población.
Rubén Guajardo Barrera, diputado local del albiazul, considera que es positivo consultar a la ciudadanía sobre aspectos relevantes como la gobernanza, infraestructura, impuestos, bienestar, educación, salud, medio ambiente, economía y seguridad, pero debe hacerse al mismo tiempo en que se Ejecutan las elecciones con tal de no ejercer un dispendio de recursos exagerado.
“Estamos en medio de una pandemia y no hay recursos ni para atender el desabasto de material, de equipo, las necesidades del personal médico, hay desabasto de medicamentos para niños con cáncer y el presidente prefiere malgastar los centavos de la gente; sólo quiere medir su poder de convocatoria y gastar la energía política de quienes aún creen en las instituciones”.