En Mariúpol, ciudad estratégica del sureste de Ucrania bombardeada durante semanas y que sufre escasez de agua, gas y electricidad, las autoridades locales acusaron este domingo al ejército ruso de haber bombardeado la víspera una escuela de arte que servía de refugio a varios cientos de personas, asegurando que los civiles quedaron atrapados bajo los escombros.
Los ocupantes rusos arrojaron bombas sobre la escuela de arte G12 ubicada en la margen izquierda de Mariúpol, donde 400 habitantes –mujeres, niños y ancianos– se habían refugiado”, señaló el municipio de la ciudad portuaria.
El edificio ha sido destruido y la gente todavía está bajo los escombros. Aún se está aclarando el número de muertos”, agregó en un comunicado publicado en Telegram. Esta información aún no ha podido ser verificada.
La situación humanitaria en Mariúpol, como en otras ciudades sitiadas, es terrible.
Un grupo de 19 niños, la mayoría huérfanos, se encuentran “en gran peligro”, atrapados en un sanatorio porque sus tutores no pueden recogerlos debido a los combates, explicaron sus allegados y testigos el sábado a la AFP.
Con información de Excelsior