Felipe Morales
Hace unas horas falleció el exjugador y entrenador Francisco “Rufo” Torres, a quien la afición de San Luis Potosí recuerda con afecto ya que durante varias temporadas dirigió a los Santos de San Luis, obteniendo un título y un subcampeonato, entre otros logros.
Nacido en Parral, Chihuahua, hace 80 años, pero juarense por adopción, se convirtió este día en una leyenda eterna del deporte ráfaga, dejando un gran legado dentro y fuera de las duelas.
“El Rufo” fue basquetbolista que llegó a este deporte por casualidad ya que comenzó como beisbolista en su ciudad natal, pero a los 16 años se involucró en las duelas cuando estudiaba en la Escuela Normal del Estado, al destacar como jugador siendo el mejor anotador en el torneo estatal, defendiendo los colores de Parral, y así convertirse en el Jugador Más Valioso y Novato del Año.
Desde esa fecha supo que su vida sería el basquetbol, heredando este gusto a su familia, como a su hijo Helman, que ha seguido sus pasos hasta esta fecha.
Maestro de una camada de jugadores como Raúl Palma, Guillermo Márquez, José Luis Arroyos, ‘Pepe’ Moreno, Jesús Aragón, además de exjugadores NBA como Horacio Llamas y Eduardo Nájera.
Su carrera como jugador dentro de las duelas es muy extensa, pero en 1972 decidió cambiar los pantaloncillos cortos por los largos y convertirse en entrenador al tomar las riendas del equipo nacional.
Su primera experiencia fue un Campeonato Centroamericano, donde iba como cuarto asistente, pero todos los entrenadores decidieron hacerse a un lado, y por azares del destino, “Rufo” tomó el control, firmando un debut soñado al subir a lo más alto del podio y colgarse la medalla de oro, al vencer a Cuba en la final.
Entre sus otras historias, está dirigir al equipo mexicano comandado por Horacio Llamas, donde vencieron al combinado de la NBA, en la que estuvo Earvin “Magic” Johnson, por lo que se puede decir que es el mexicano que venció a la leyenda de los Lakers.