Al menos 23 personas murieron cuando intentaron escalar una valla fronteriza entre Marruecos y un enclave español en el norte de África, en tanto que organizaciones de derechos humanos en España y Marruecos exhortaron a ambos países a que investiguen las circunstancias de esas muertes.
Las autoridades marroquíes señalaron que los fallecimientos de debieron a una estampida de personas que intentaron escalar la cerca de hierro que separa la ciudad de Melilla y Marruecos. En un comunicado, el Ministerio del Interior de Marruecos indicó que 76 civiles resultaron heridos igual que 140 agentes de seguridad marroquíes.
El ministerio había informado inicialmente de cinco muertes. Las autoridades citadas por Television 2M oficial de Marruecos actualizaron la cifra a 18 el sábado y después la aumentaron a 23.
La Asociación de Derechos Humanos de Marruecos reportó 27 muertos, pero la cifra no pudo ser confirmada de momento. Dos miembros de las fuerzas de seguridad de Marruecos y 33 migrantes lesionados durante el incidente fronterizo fueron atendidos en hospitales en las ciudades marroquíes de Nador y Oujda, publicó la agencia nacional marroquí de noticias MAP.
El presidente del gobierno español Pedro Sánchez condenó el sábado lo que describió como un “asalto violento” y un “ataque a la integridad territorial de España”. Las autoridades españolas dijeron que 49 guardias civiles sufrieron lesiones menores.
Si hay un responsable de todo lo que ha sucedido en esa frontera son las mafias que trafican con seres humanos, de acuerdo con el ejecutivo español. Pedro Sánchez hizo sus declaraciones en momentos en que la Asociación Marroquí de Derechos Humanos compartió videos en redes sociales en las que se ve a docenas de migrantes tendidos en el suelo, muchos de ellos inmóviles y algunos sangrando bajo la vigilancia de fuerzas de seguridad marroquíes.
“Los dejaron ahí sin ayuda durante horas, lo que aumentó el número de muertos”, dijo el grupo de derechos humanos en Twitter. La asociación exigió una investigación “exhaustiva”.
En otros videos de la asociación, un guardia de seguridad marroquí parece golpear con una porra a una persona que yacía en el suelo. En un comunicado difundido el viernes en la noche, Amnistía Internacional manifestó su profunda preocupación por los acontecimientos en la frontera. “
Aunque los migrantes hayan podido actuar con violencia en su intento de entrada a Melilla, en el control de fronteras no todo vale”, dijo Esteban Beltrán, director de Amnistía Internacional España. “Los derechos humanos de las personas migrantes y refugiadas deben ser respetados, y situaciones como la vivida hoy no pueden repetirse más”.
Con información de: Milenio