Marcela Loyola
Ante la violencia que se está viviendo en México por los asesinatos diarios, la Iglesia Católica hizo un llamado a unirse por la sangre derramada y emprender un camino por la paz, así lo manifestó el vocero del Arzobispado, Juan Jesús Priego Rivera.
Indicó que este es un llamado del Episcopado Mexicano, de los obispos de México, que convocan a una jornada de oración por la paz.
“Necesitamos estar unidos en estos momentos de indignación de nuestro pueblo ante la barbarie de la violencia que está abriendo una puerta y son cuatro las reacciones que les pedimos” dijo.
Expuso que la primera acción es que en todas las misas a celebrarse el próximo domingo 10 de julio, se haga en memoria de todos los sacerdotes, religiosos y religiosas que han sido asesinados en el país y ofrecer la intención de la eucaristía por su vida, para que su dolor nos acompañe en este camino por la paz y en los templos se puedan colocar fotografías de estos hombres y mujeres que han dado su vida.
Abundó que en este mes de julio, están solicitando celebrar misas en lugares representativos, por todas las personas que han desaparecido o sufrido la violencia, como son activistas y periodistas.
Priego Rivera manifestó que, también se pedirá por los victimarios, orar por sus vidas y tenderles la mano para recibirlos con el corazón arrepentido “porque ellos también son nuestros hermanos”.
Indicó que cada parroquia podrá definir a las acciones pertinentes para emprender este camino por la paz que hoy tanto se necesita, y es necesario emprender acciones para poder construir un camino de paz.
El vocero del Arzobispado señaló que la inseguridad es un tema complejo que necesita de todas y todos para atenderlo desde la raíz y consideró que pese a la violencia que se está viviendo no está a favor de que se arme a las personas, sino se podrían disparar los asesinatos.