Ponerse un piercing suele ser un proceso doloroso y que requiere muchos cuidados para no infectar la herida, en algunos casos un descuido puede costar la vida.
En Brasil una chica de 20 años murió tras ponerse un piercing en la boca, la joven terminó pescando una infección que la mataría unos días después.
Identificada como Andressa Souza, esta joven acudió a un lugar para perforarse el labio sin imaginar que unos días después experimentaría fiebre acompañado de dolor de cabeza y malestar general.
La familia de esta chica sospechaba que era un caso de dengue, enfermedad transmitida por mosquitos y de la que ya se habían registrado otros casos en esa ciudad.
La salud de Andressa estaba cada día peor por lo que tuvo que ser ingresada de urgencias a un hospital local.
Tras una serie de estudios los médicos determinaron que Andressa tenía una infección en la sangre que ya había comprometido el 37% de su cerebro.
Al final, lamentablemente los médicos no pudieron hacer nada por salvar a Andressa y murió en ese hospital tras 24 días internada.
Ahora las autoridades investigan el lugar donde la joven se practicó la perforación, las condiciones sanitarias pudieron ser un factor importante en la infección.
Con información de: Excelsior