Un megaproyecto eléctrico está a punto de otorgarse bajo consideraciones opacas por invitación a tres o más personas y, entre los posibles beneficiarios por ser a quienes la Comisión Federal de Electricidad (CFE) convocó a cotizar, se encuentran familias conocidas.
Las firmas convocadas son Eléctrica Aselec, empresa de Edgardo Meade de Zamacona, familiar del excandidato presidencial, José Antonio Meade Kuribreña; La Jolla Internacional, una filial mexicana de la empresa china Harbin Electric, relacionada con la pareja del director de la CFE, Julia Abdala; de Grupo Dragón, la firma de Ninfa Salinas, hija de Ricardo Salinas Pliego y de HyR, una contratista menos notoria.
El megaproyecto es verde: consiste en la construcción de la segunda etapa del parque de generación fotovoltaica en Puerto Peñasco, Sonora, por el que la CFE no quiso licitar como sí lo había hecho en la primera fase que devino en la adjudicación a favor de la firma Seselec.
Este viernes se tiene previsto el fallo de asignación y, de acuerdo con personal de la CFE consultado, la cotización más próxima a la exigencia de CFE perfila a la empresa de Edgardo Meade como la ganadora.
La decisión de realizar el procedimiento por invitación dejó sin poder competir a otras empresas del sector, entre estas a la propia Seselec que de por sí, lleva 80 millones de sobrecosto encima de los 300 millones de dólares del contrato original, pero con seis meses de retraso en las ministraciones de la CFE.
En conjunto, el megaproyecto fotovoltaico de Puerto Peñasco, implica una inversión total de mil 644 millones de dólares (unos 33 mil millones de pesos) y, pese al monto y la relevancia de la inversión, ha sido poco publicitado en un contexto de descalificaciones discursivas del presidente Andrés Manuel López Obrador y del director de la CFE, Manuel Bartlett, a las energías limpias.
La central pretendidamente será la más grande de América Latina y una de las más grandes del mundo, con almacenamiento de energía mediante baterías de ion-litio.
Con información de Proceso