Director de cintas imprescindibles como “Rojo amanecer” y “El callejón de los milagros”, fue despedido por instituciones y colegas una madrugada que sacudió al país. “Propuso un cine de ruptura, crítico y social, que ahora nos es más necesario que nunca”.
No hay duda, vivimos días inverosímiles. La noche de este miércoles, a la par de un sismo más, gran parte del país se enteró del fallecimiento del director de cine Jorge Fons, uno de los pilares de la cinematografía mexicana, hacedor de películas emblemáticas en su tiempo adversas, proveedor de una memoria que no ha de olvidarse, alquimista de cintas que un día provocaron, incomodaron, y después se enlatarán en la memoria más perseverante, como “El callejón de los milagros” (1995), “Rojo amanecer” (1989) y “Los albañiles” (1976).
Así lo anunció con pesar la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas (AMACC) la madrugada de este jueves, misma de la que Fons, finado a los 83 años, era miembro honorario y la cual le entregó varios premios Ariel, directos e indirectos, dos como Mejor Película, por “Rojo amanecer” y “El callejón de los milagros”, y tres a Mejor Dirección, por la cinta colectiva “Tú, yo, nosotros” (1970) y las dos previamente mencionadas, así como el Ariel de Oro en 2011 en reconocimiento a su Trayectoria Profesional.
“Se nos fue Fons. La AMACC abraza a su familia y a la comunidad por esta pérdida. Director de cintas emblemáticas como Rojo amanecer y El callejón de los milagros, Fons encabezó la renovación de la AMACC. Miembro emérito de la misma y Ariel de Oro 2011. Te vamos a extrañar, Jorge”, anunció la Academia.
De esta noticia se volcaron las instituciones y nombres más destacados de nuestra cinematografía.
“Jorge Fons nos propuso un cine de ruptura, crítico y social, que ahora nos es más necesario que nunca (…) Gracias por tu legado, Jorge, por enseñarnos formas de resistencia”, dedicó el Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine).
”El cine no está hecho para que pienses dentro de la sala, está hecho para que veas la vida y te conmuevas, y ya luego te pondrás a pensar’, nos dijo una vez Jorge Fons. Esta frase seguirá resonando en nosotros. Hasta siempre, maestro”. Esto publicó la Cátedra Ingmar Bergman en Teatro y Cine, de la UNAM.
“Hasta siempre, talentoso, generoso, enorme Jorge Fons. Te voy a extrañar siempre”, declaró Leticia Huijara, actual presidenta de la AMACC.
También la directora del Instituto de Bellas Artes y Literatura (INBAL), Lucina Jiménez, se mostró dolida por la pérdida: “Mi querido amigo, Jorge Fons. Te marchaste por el camino donde transitan los grandes. Una gran tristeza tu partida. En ti encontré a un ser generoso y comprometido. Una compañía en la complicidad de muchas batallas. Anoche escuché tu voz en ese mensaje lleno de nostalgia mutua”.
El palmarés de director, aunque con un puñado de cintas, muchas invaluables, también fue condecorado a nivel internacional con el Premio Especial del Jurado a Mejor Dirección en la Berlinale de 1977, por “Los albañiles”, una adaptación de la novela de Vicente Leñero, así como el Premio Especial del Jurado del Festival Internacional de San Sebastián en 1990, por “Rojo amanecer”, que, por cierto, ese mismo año se llevó 11 Ariel.
La Coordinación de Difusión Cultural de la UNAM destacó que Fons fue egresado de la primera generación del entonces Centro Universitario de Estudios Cinematográficos (CUEC), ahora Escuela Nacional de Artes Cinematográficas (ENAC).
Y la actriz Dolores Heredia, otrora presidenta de la AMACC, publicó unos versos de la poeta y directora iraní Forough Farrokhzad:
“Yo procedo de los árboles/ No soporto respirar aires estancados/ Un pájaro que murió me dio un consejo: ten siempre en la mente el vuelo. (…) Vuela alto, grande y querido Jorge Fons. Lloro. Y tiemblo”.
Con información de: El Economista