La mañana de este lunes 17 de octubre (tiempo local), en lo que Ucrania llamó un “acto de desesperación”, el Ejército de Rusia atacó con 43 drones kamikaze algunas infraestructuras energéticas, dejando sin electricidad a regiones como Kiev, Dnipropetrovsk y Sumi; de acuerdo con la agencia informativa Ukrinform, de éstos, la fuerza aérea ucraniana confirmó que 37 pudieron haber sido derribados por las tropas defensivas.
“Volaron desde el sur, 43, de los cuales 37 fueron eliminados. Participaron todas las fuerzas y medios, aviación, sistemas de misiles antiaéreos y otras fuerzas de defensa. Al menos el 86 por ciento de los drones destruidos son ‘Shahed’. No es un mal resultado para estos objetivos”, dijo en televisión el representante del comando de la fuerza aérea ucraniana, Yuriy Ihnat.
De acuerdo con la AFP, los ataques ocurrieron en las primeras horas de la mañana, cuando las alarmas antiaéreas se activaron entre las 06:34 y 06:54 horas, tiempo local (entre 22:34 y 22:54 horas, tiempo de México). Los periodistas de dicha agencia afirman que vieron drones sobrevolando un barrio central de la capital y cómo los oficiales de la policía les dispararon con armas automáticas y también reportaron columnas de humo por las explosiones en toda la ciudad.
Tras los ataques, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, confirmó que las tropas del Kremlin habían atacado su país con drones suicida y misiles, pero reiteró que aunque golpeen sus ciudades, “no lograrán destruirnos”. De acuerdo con activistas, esos atroces ataques en Ucrania dejaron al menos tres heridos y el mismo número de muertos, entre ellos una joven mujer embarazada; y también denunciaron que algunos alcanzaron edificios residenciales.
Tras los ataques, el nuevo Alto Comisionado de Derechos Humanos de la ONU, Volker Türk, expresó su preocupación por la escalada del conflicto en Ucrania y pidió no tomar a las civiles como objetivo. “Recibimos informes de nuestros compañeros en el lugar sobre estos ataques con drones. Es absolutamente importante que los civiles no sean objetivos y es muy difícil en zonas densamente pobladas (…) Toda escalada en una guerra es muy preocupante para nosotros, y está pasando en Ucrania”, dijo el austriaco, quien este lunes relevó en el cargo a la chilena Michelle Bachelet.
Es importante mencionar que estas supuestas agresiones con drones kamikaze llegan a una semana de que Rusia intensificara sus bombardeos sobre Ucrania, pero también a solo tres días de que Vladimir Putin declarara que por ahora ya no eran necesarios los ataques masivos sobre la nación ex soviética, “más adelante veremos”, aseguró el jefe del Kremlin durante una cumbre de dos días que sostuvo la semana pasada en Astaná, Kazajistán.
Autoridades piden a los ciudadanos dejar actuar a las tropas
El representante de la fuerza aérea de Ucrania, Yuriy Ihnat, instó a la ciudadanía a dejar que las tropas hagan su trabajo al comentar una imagen que circula en las redes sociales en la que se ve a un hombre que desde una ventana intenta disparar a algo en el cielo: “No hay necesidad de ‘disparar’ por la ventana”, dijo, y advirtió que las balas que se disparan en zonas densamente pobladas regresan luego y pueden alcanzar a alguien, sobre todo las de las escopetas. Agregó que Ucrania espera ahora que sus socios refuercen su sistema de defensa aérea para cubrir la mayor parte posible del territorio ucraniano.
Previamente, el ministro del Interior, Denis Monastyrsky, había informado de que Rusia había atacado Ucrania con 42 drones kamikaze, de los cuales 36 fueron derribados. Treinta de estos drones, agregó, fueron dirigidos contra Kiev, y las fuerzas ucranianas lograron derribar 25. “El ataque debía superar los del pasado lunes, cuando hubo bombardeos con misiles, pero no fue así”, dijo el ministro, según el cual eso demuestra que Rusia no logró su objetivo.
Con información de: El Heraldo