Violencia Vicaria
Por irracional que parezca, hay padres que con tal de afectar a sus ex parejas, son capaces de ejercer niveles extremos de violencia contra sus propios hijos, eso es la violencia vicaria y ayer en el Congreso del Estado se dio un paso importante al incorporarla al marco legal del estado.
La abrumadora realidad de la violencia vicaria que padecen muchas mujeres en San Luis Potosí se impuso. En especial esa dramática realidad que en las ultimas semanas la vimos reflejada en redes sociales, en el caso de la niña de tres años cuyo padre de nacionalidad holandesa, sustrajo a la menor y apareció en Estados Unidos, sin que la madre pudiera hacer mucho, mas que prepararse ahora para enfrentar una costosa disputa legal a nivel internacional.
Empezar a hacer visible ese tipo de violencia contra las madres de familia, quienes en su mayoría la padecen de manera silenciosa, es un buen paso, aunque ahora falta esperar que se den los siguientes para reformar los Códigos Penal y Familiar del Estado y que no sea letra muerta ante la insensibilidad o desconocimiento de los encargados de impartir y procurar justicia.
Mujeres en el gabinete
Los recientes nombramientos de dos mujeres jóvenes en el gabinete estatal, podrían despertar algunas preocupaciones por su escasa trayectoria pública o conocidos logros profesionales. Hay que dar el beneficio de la duda porque quizá en esas características podría radicar su éxito. Habría que confiar entonces en que -a pesar de no haber sido detectadas por un cazatalentos a la usanza del gabinetazo de Vicente Fox- esperemos que les vaya bien y que no se haya tratado de una salida fácil y apresurada para tapar un hueco por cumplir superficialmente con una cuota de género.
Ni 12 días de vacaciones ni salarios de ocho mil
Es decepcionante que se juegue tan ligeramente con las necesidades de la clase trabajadora. Cada mañana, miles de mexicanos y mexicanas se levantan en condiciones difíciles para acudir a trabajar, llevar el pan a su casa y sacar adelante a sus familias en lo básico: salud y educación, a pesar de las precarias condiciones y escasas oportunidades que este país ofrece. Y para colmo, los tomadores de decisiones parecen tomarse muy a la ligera las iniciativas y gestiones que impactan en esa calidad de vida de la clase trabajadora.
Hace algunas semanas se anunciaba una esperanzadora alternativa entre los legisladores federales de votar una opción que otorgaría 12 días de vacaciones y hoy, queda claro que solo fue un golpe mediático que ayer ya se guardó en la “congeladora”, es decir, no avanzará en el corto ni mediano plazo.
Otra declaración que parece podría perderse en el tiempo y en la compleja burocracia, fue el anuncio de promover un incremento al salario mínimo de hasta ocho mil pesos. La promesa pareció esfumarse casi de inmediato al confirmar varios especialistas en asuntos laborales, que estaba lejanísima de cumplirse dado que no es cuestión de decisiones legislativas, sino una atribución a nivel federal.
Por Lidia Juache