La atmósfera prenavideña en París se ha visto bruscamente ensombrecida ese viernes por un mortal tiroteo. Al menos tres personas han fallecido y tres han resultado heridas, una de ellas de extrema gravedad, después de que un hombre de 69 años haya disparado al mediodía de este viernes contra varias personas en tres locales kurdos -un centro cultural, un restaurante y una peluquería- situados en un céntrico barrio comercial de la capital francesa, en el distrito X.
La policía ha detenido al presunto autor de los disparos, un individuo blanco, de nacionalidad francesa y con antecedentes racistas, según la fiscal de París, Laure Beccuau. El atacante, que resultó herido leve durante su detención, estaba en libertad vigilada desde hacía solo 11 días y a la espera de juicio por unos hechos sucedidos hace un año. Había solicitado poder salir de la cárcel parisina donde cumplía prisión preventiva y, después de que sus circunstancias fueran revisadas, se aceptó su petición. El detenido, un ferroviario jubilado, socio de un club de tiro y con permiso para varias armas de fuego, era conocido por las autoridades francesas por dos intentos de homicidio cometidos en 2016 y diciembre de 2021. Al menos este último tuvo lugar en un campamento de migrantes en el barrio de Bercy de París. El hombre se presentó allí con un sable.
En un primer momento, las autoridades pidieron a la población, a través de Twitter, que evitara la zona donde se han producido los hechos, en concreto la calle Enghien, por el temor de que pudiera haber cómplices y otros eventuales objetivos. Allí se encuentra el Centro Ahmet Kaya, una asociación cultural llamada así en honor al cantante kurdo homónimo.
Un vecino explicó a la agencia AFP las escenas de pánico. “Vi a la policía entrar a la peluquería, donde había dos personas en el suelo, heridas en las piernas. Había sangre”, explicó este testigo. “La gente estaba en shock”, añadió.
Vi a la policía entrar a la peluquería, donde había dos personas en el suelo, heridas en las piernas
La asociación detrás del Centro Ahmet Kaya se creó con el objetivo de “promover la integración gradual” de la población kurda que vive en la región de la Isla de Francia, a la que pertenece la ciudad de París y sus populosos suburbios.
Varios líderes de La Francia Insumisa (LFI) -izquierda radical-, como Mathilde Panot, jefa del grupo parlamentario, apuntaron de inmediato a la extrema derecha como origen ideológico de los asesinatos. “La extrema derecha racista debe ser neutralizada”, afirmó Panot en un tuit. La alcaldesa Hidalgo también caracterizó al autor del tiroteo como militante de la extrema derecha y dijo que los kurdos de París merecen protección.
Marine Le Pen, excandidata presidencial del Reagrupamiento Nacional (RN, extrema derecha), no se dio por aludida ni reaccionó a la provocación. Le Pen expresó su “estupor y emoción después del tiroteo en pleno corazón de París”. La dirigente del RN agradeció a las fuerzas del orden “por su rápida y decisiva intervención”. “Nuestros pensamientos se dirigen a las familias de las víctimas de este terrible drama”, agregó.
La fiscalía nacional antiterrorista no ha asumido por ahora el caso de hoy, como suele hacerlo cuando existe una sospecha muy clara de móvil yihadista. De momento se investiga como un delito común.
El ministro del Interior admite que el atacante no figuraba en el fichero nacional de ultraderechistas violentos
El ministro del Interior, Gérald Darmanin, que se hallaba en el norte de París, regresó a la capital y se dirigió al lugar del tiroteo. Según, él todos los indicios apuntan a que el atacante actuó solo. No está claro si su objetivo eran específicamente los ciudadanos de origen kurdo o si simplemente quería hacer daño a extranjeros. Con todo, Darmanin prometió que se reforzarán las medidas de seguridad para proteger a los kurdos residentes en Francia.
Un dato relevante y que puede tener consecuencias políticas es que el presunto autor, tal como confirmó el propio Darmanin, no figuraba en el fichero nacional de personas radicalizadas. No estaba en la lista de ultraderechistas violentos, pese a los antecedentes por ataques racistas. El ministro puso énfasis en que el atacante no formaba parte de las organizaciones de extrema derecha desarticuladas en los últimos años ni de los complots descubiertos por la policía.
Mientras hablaba Darmanin con la prensa, grupos de manifestantes kurdos se acercaron a la zona para desafiar el cordón de seguridad, corearon consignas contra el presidente turco, Erdogan, a quien llamaron “asesino” y “terrorista”, y se enfrentaron a la policía. Seis agentes resultaron heridos en los disturbios.
Hace diez años, tres militantes kurdas fueron brutalmente asesinadas en plena calle en París
-El próximo 9 de enero se cumplirán diez años del brutal asesinato de tres militantes kurdas en plena calle, en París. Las tres mujeres pertenecían al Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK). Su verdugo, el turco Omer Güney, murió en la cárcel, como consecuencia de un tumor cerebral, antes del juicio.
Con información de: La Vanguardia