En Querétaro, un hombre identificado como Benjamín “N”, enlutó al pueblo mexicano tras haber envenenado a los perros rescatistas Tango y Athos, este ahora vuelve a sonreír con la presencia de los hijos del último: Balam y Orly, los binomios caninos que volaron directo a Turquía para ayudar en las labores de búsqueda, tras el sismo ocurrido el pasado 6 de febrero de este año y que dejó miles de muertos.
Ambos canes pertenecían a la Cruz Roja. En el caso de Athos era un perro Border Collie que brindó su apoyó, en la Ciudad de México, tras el temblor de septiembre del 2017. Como resultado, localizó a 7 personas con vida. De igual manera participó en las labores tras la erupción de un volcán en Guatemala. Tango, por su parte, era un pequeño Yorkshire que se desempeñaba como asistente emocional. Su carácter dócil sirvió para ayudar a gente con traumas y conmociones, ansiedad y altos niveles de estrés.
El responsable del crimen fue sentenciado a 10 años de prisión y pagar un total de 2.4 millones de pesos como reparación del daño por su acto de crueldad animal; colocó veneno en salchichas y depositándolas después en una jardinera.
Balam y Orly, entran en acción como su padre
Estos simpáticos hermanos, hijos de Athos, son mezcla de Border Collie y Pastor Australiano. También pertenecen a la Cruz Roja y fueron entrenados por Anneth López, Daniel Hernández, Ángel Martínez y Alberto Peña. Los dos emprendieron un largo viaje de 16 horas hasta las naciones mencionadas. Además de Balam (quien también fue envenenado, pero sobrevivió) y Orly, July y Rex son sus compañeros de trabajo; “todos son especialistas en búsqueda y rescate”.
De acuerdo con sus entrenadores, los binomios caninos están capacitados para este tipo de labores (consideradas como peligrosas) y forman parte del equipo de la Cruz Roja en Puebla y Querétaro.
Balam, Orly y el resto de los binomios tendrán mucho trabajo
La última cifra de víctimas por el sismo ocurrido en Turquía y Siria se eleva a más de 20 mil. Sin embargo, las labores de búsqueda se han intensificado bajo la esperanza de encontrar más sobrevivientes que pueden estar atrapados bajo los escombros de los inmuebles devastados por el movimiento telúrico.
Para Balam, Orly y el resto de sus compañeros caninos no será una tarea sencilla, pues además deberán soportar las gélidas temperaturas en un lapso de 72 horas, considerado crucial para desempeñar sus tareas. Por desgracia, el balance de muertos no deja de crecer. Por otro lado cerca de 23 millones están “potencialmente en riesgo, incluidos unos cinco millones de personas vulnerables”, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Un total de 150 rescatistas de la Defensa Nacional, Marina y de la Cruz Roja Mexicana con 16 binomios caninos arribaron a las tierras afectadas como parte de la “misión rescate” de México, de acuerdo con el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Marcelo Ebrard. De igual manera el grupo de rescate conocido como “Los Topos” también llegaron a Turquía, después de hacer los trámites necesarios para poder viajar.
Con información de El Heraldo de México