La Escuela Secundaria Técnica 53 en Durango dio la bienvenida a un nuevo alumno que logró robarse el corazón de alumnos y maestros.
Se llama Nacho y es un perrito al que refugiaron en uno de los salones para evitar que fuera atropellado.
En un mensaje en Instagram, la profesora Lucelly explicó que el lomito llegó el pasado 2 de febrero siguiendo a su dueño y para evitar que tuviera un accidente al quedarse esperando en la calle, optaron porque se uniera a la clase.
Muy obediente, Nacho pasó al salón y como un buen alumno tomó asiento y se unió a la clase.
La fotografía del perrito muy atento a la clase conmovió a los usuarios de redes sociales.
“Más atento que muchos de los alumnos”, señalaron en los comentarios.
Con información de: Aristegui Noticias