Hasta cuatro futbolistas abandonaron la selección de Cuba que disputa la Copa Oro de Concacaf en Estados Unidos, informó este miércoles la televisión de la isla.
Abandonaron la delegación los futbolistas Roberney Caballero, Denilson Morales, Neisser Sandó y Jassael Herrera”, dijo de manera escueta un comentarista deportivo de la televisión local, sin dar detalles de la fuga.
Más temprano, algunos medios fuera de la isla habían divulgado la noticia, precisando que la deserción se produjo el martes, después de que el equipo cubano cayera 1-0 en su debut ante Guatemala, en la cancha del Inter de Miami en Fort Lauderdale (Florida), y antes de viajar a Houston para jugar sus próximos dos partidos: el sábado ante Guadalupe y el 4 de julio ante Canadá.
La Copa Oro, que se disputa en Estados Unidos, ha sido tradicionalmente un evento deportivo propicio para estas fugas. Desde 2002 a la fecha, más de 20 figuras del futbol abandonaron las delegaciones de la isla, incluidos jugadores estelares como Léster Moré y Osvaldo Alonso, este último nacionalizado estadunidense y el Jugador Más Valioso (MVP) en los torneos de ese país en 2010 y 2011.
La grave crisis económica por la que atraviesa Cuba ha provocado en los últimos dos una ola migratoria masiva, principalmente de jóvenes, incluidos deportistas de alto rendimiento.
Con la fuga de los cuatro futbolistas se eleva a más de 30 la cifra de deportistas cubanos que abandonaron delegaciones oficiales en los primeros seis meses de 2023, una práctica que está afectando a más de una decena de disciplinas deportivas, la mayoría olímpicas, incluidas el boxeo, atletismo, judo, remo, tiro y tenis de mesa.
Los casos más sonados desde que comenzó este año fueron las de los campeones mundiales Yoenlis Feliciano Hernández (boxeo) y Denia Caballero (disco). Otros deportistas han optado por emigrar legalmente como es el caso del beisbolista Yariel Rodríguez, primer lanzador de Cuba en el Clásico Mundial de marzo.