El norte sobre el vacío, de Alejandra Márquez Abella, obtuvo el Ariel a la mejor película en la edición 65 que por vez primera se realizó en el Teatro Degollado de esta capital. El director ganador fue Alejandro González Iñárritu, por Bardo, falsa crónica de unas cuantas verdades, a pesar de que fue el único varón en una nominación que incluyó a cuatro directoras.
La cinta ganadora se impuso a los filmes Huesera, La caída, La civil y Bardo, esta última considerada ampliamente favorita sobre todo luego que Iñárritu, quien se dijo “más emocionado de lo que esperaba” al recibir el Ariel, obtuvo el galardón a mejor director.
Bardo fue la película que arrasó en la entrega, pues también obtuvo el premio a mejor actor, para Daniel Giménez Cacho; a efectos visuales, Guillaume Rocheron y Olaf Wendt; diseño de arte, Eugenio Caballero; sonido, Nicolar Becker, Martín Hernández, Ken Yasumoto, Frankie Montaño, Jon Taylor y Santiago Núñez.
También ganó vestuario para Anna Terrazas, fotografía para Darius Khondji, y edición para el propio Iñárritu, totalizando ocho premios.
“Un saludo a todas las (personas) que resisten, que luchan por contar sus propias historias, a todas las que se pusieron en el empeño de hacerle ver a la Suprema Corte de Justicia de la Nación que la disolución de ese fideicomiso de cine era un acto inconstitucional y también un saludo a los directores y actores de Estados Unidos que están peleando por nuestros derechos”, dijo Giménez Cacho al recibir su estatuilla.
La siguiente película que obtuvo más premios fue Huesera como mejor ópera prima, dirigida por Michelle Garza Cervera. También ganó por efectos especiales a cargo de Raúl Camarena, Gustavo Campos, Miguel Ángel Rodríguez y Juan Carlos Santos; guion original de Abia Castillo y Michelle Garza Cervera, y maquillaje para Adam Zoller.
En largometraje documental el ganador fue Helmut Dosantos por Dioses de México en un empate con Teorema de tiempo, de Andrés Kaiser. Música original, Zapatos rojos, por Camilla Uboldi. También se entregaron dos Ariel de oro para Marcela Fernández Violante y Juan Mora Catlett, ambos cineastas de larga trayectoria.
En los rubros de coactuación, los ganadores fueron Úrsula Pruneda, por Trigal, mientras Raúl Briones, por El norte sobre el vacío, fue el galardonado masculino.
Como mejor revelación actoral el premio lo obtuvo Emilia Berjón, por la película Trigal.
El corto de ficción fue ganado por Agustina, de Luciana Herrera Caso. El cortometraje documental ganador fue Las nubes son de música.
Con información de: La Jornada