El club de futbol australiano Western Bulldogs deberá pagar una indemnización de 3.8 millones de dólares a Adam Kneale, por no tomar las medidas necesarias para protegerlo de abusos infantiles, según informaron este jueves fuentes judiciales.
Los miembros del jurado del Tribunal Supremo del estado de Victoria expresaron en su veredicto que hubo “negligencia” por parte de los Western Bulldogs (también conocido como Footscray Football Club), ya que no previnieron que Adam Kneale que sufriera estos abusos, según precisó una fuente de la corte a la agencia EFE.
A raíz del veredicto, la jueza Melinda Richards ordenó al club el pago de la millonaria suma, considerada como la indemnización más alta otorgada en Australia a una víctima de pederastia. Richards, precisó:
El dinero serviría para compensar el dolor, sufrimiento, la pérdida de ingresos y los gastos médicos vinculados a esta agresión.
Kneale fue violado entre 1984 -cuanto tenía doce años- y 1990 en las instalaciones del club por Graeme Hobbs, quien fue el entrenador del equipo del suburbio de Footscray y conocido recaudador de fondos del club.
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El demandante argumentaba que el club tenía responsabilidad subsidiaria en este abuso sexual porque permitió que Hobbs, fallecido en 2009, tuviera acceso especial al menor y a las instalaciones deportivas de Western Bulldogs.
Además, la víctima, actualmente de 51 años, presentó otras reclamaciones económicas en la demanda presentada ante la justicia australiana el año pasado, por considerar que los Western Bulldogs no se acercaron a él cuando la violación se hizo pública en la década de 1990.
Kneale argumentó en este juicio que, poco tiempo tras la violación, desarrolló adicciones, estrés postraumático, depresión y ansiedad, una situación que evitó que desarrollara todo su potencial en su trabajo.
En 1993, Kneale denunció a Hobbs ante la Policía de Victoria, lo que abrió un proceso judicial que concluyó en el encarcelamiento de su agresor y otro hombre por varios delitos, como la participación de una red que entregó al demandante a otros pederastas para que también abusaran de él.
Al año siguiente, Hobbs se declaró culpable de haber violado a Kneale, aunque los Western Bulldogs negaron haber tenido conocimiento de este delito, según recordó la agencia AAP.
Con información de: EFE