El segundo vuelo no tripulado de prueba de la empresa privada aeroespacial SpaceX, de Elon Musk, fue lanzado con aparente éxito este sábado desde la base de Boca Chica, en Texas, a diferencia de su experimento del pasado abril.
Sin embargo, tras unos minutos de haber despegado, Starship, de casi 122 metros (400 pies) de largo, explotó.
Pese a ello, SpaceX considera que fue un “éxito” la prueba del segundo vuelo de Starship, que es considerado el cohete más grande y poderoso que se haya construido.
Ello debido a que el problema se produjo cuando había casi finalizado el encendido de los motores para colocarlo en una órbita alrededor del mundo.
No obstante, explican, ya había cumplido su cometido de lanzar la nave hacia el espacio.
“Lo más brillante del día, el exitoso despegue”, dijo el comentador del lanzamiento, John Insprucker.
Por su parte, Kate Tice, quien también fungió como comentadora, agregó, “logramos sacar muchos datos, y eso nos ayudará a mejorar para nuestro próximo lanzamiento”
Cabe mencionar que el lanzamiento fue seguido por más de 200 millones de personas mediante la red social X (antesTwitter) también propiedad del magnate.
Pero a los 12 minutos del lanzamiento, los controladores de SpaceX perdieron comunicación con Starship y se cortó la transmisión en directo por los distintos canales.
Se pretendía que la nave llegará a una altura de 240 kilómetros (150 millas), en un vuelo no tripulado de 90 minutos, tiempo en que Starship debía girar alrededor de la Tierra para caer en el Pacífico cerca de las aguas de Hawai.
Con información de: Radio Fórmula