Marcela Loyola
El vocal ejecutivo del INE en San Luis Potosí, Pablo Sergio Aispuro Cárdenas reconoció que, el Instituto Nacional Electoral, requiere una reforma profunda, pero con la participación de todos los partidos políticos, la sociedad en general y la academia, sin segregar a nadie porque luego no funcionan.
“Me parece que hacen falta ajustes importantes en el INE, no creo que debamos seguir organizando elecciones de esta manera, con una densidad operativa que afecta incluso a las personas que elaboramos en el INE porque es sumamente extenuante, mucho trabajo a pie, mucho trabajo a mano y está muy sobrecargado de responsabilidades del Instituto”, dijo.
Considero que, es necesario que la sociedad civil haga una reflexión al respecto de los cambios que requiere el INE, “me parece que tenemos que abordar ya el reto de asumir las tecnologías de la información y comunicación para, sumarlos al trabajo institucional sin demérito de la confiabilidad de los procedimientos y de los resultados”.
Aispuro Cárdenas aseveró que, México está preparado ya para la implementación de nuevas tecnologías y, “lo que necesitaríamos es a los partidos políticos y su participación en este nuevo diseño, en una gestión electoral diferente, pero también la confianza en la institución porque si algo nos ha retenido con métodos tan engorrosos, tan complicados es el asunto de la desconfianza que se ha alentado muchas veces desde lo que antes era la oposición y lo que hoy es el gobierno en funciones”.
— PotosíNoticias (@Potosinoticia01) July 3, 2024
Indicó que, es el momento oportuno porque poblacionalmente van creciendo los números y esto implicaría que si hoy instalaron más de 170 mil casillas, para los años 2027 y 2030 se tendrían que instalar mucho más, sobre todo el modelo que es del año de 1990.
Abundó que, por ello se tiene que revisar a fondo, en una posible refundación del instituto en el que participen todas las fuerzas políticas, “la historia ha demostrado que las reformas profundas o determinaciones estructurales en materia político electoral hechas desde el poder excluyendo a un partido, dos o más llevan al fracaso como sucedió en el 94 y luego la elección del 2006, que se segregó a una parte de las fuerzas políticas del país”.
Consideró que, por eso se tiene que hacer una reforma con el consenso y participación de todas las fuerzas políticas del país, incluso de la academia, los medios de comunicación y la sociedad civil en general, para una reconfiguración del INE, donde queden bien definidas las facultades y atribuciones que tendría el Instituto.
“Con relación a los Oples, es un tema que se tiene que revisar a fondo porque han acumulado durante todos estos años una enorme experiencia para operar elecciones en lo local, en los subnacional, en lo municipal. Todavía hay una enorme experiencia y una cantera de posibilidades que debería de sumarse y de esta suerte de desaparición no me parece posible, tendremos que revisar un modelo diferente porque ya hay mucha experiencia y mucha capacidad y no deberíamos de apegarnos a un discurso definitorio”, puntualizó.