El año pasado, en San Luis Potosí 21.4 por ciento de las viviendas estaban habitadas por cuatro personas y de ellas, 39 por ciento tenían dos dormitorios, situación que genera graves problemas como el hacinamiento y espacios proclives a delitos de carácter sexual.
La Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (ENADID) 2023 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), precisa que en la entidad existen 812 mil 410 viviendas particulares, habitadas por 2 millones 859 mil 701 personas; un millón 482 mil 246 son mujeres y un millón 377 mil 455 son hombres.
El ejercicio demoscópico establece que 237 mil 245 hogares tienen cuatro cuartos (29%) y 319 mil 204 tienen dormitorios con dos camas (39%), que representan la mayoría de la composición.
Además, 178 mil 969 casas son habitadas por cuatro personas (21.4%), el mayor porcentaje de los núcleos familiares.
Aunque no en todos los hogares padecen de hacinamiento, en algunos casos sus habitantes no cuentan con una habitación para dormir, por lo que deben compartir con alguien más o descansar en un espacio adaptado.
Prácticamente todas las viviendas están lejos de la precariedad, pero todavía existen indicios que denotan la falta de cobertura total para dotar de espacios dignos a sus residentes.
De acuerdo con la ENADID, hay 738 mil 674 viviendas construidas con tabique, ladrillo, piedra, cantera, cemento o concreto; 71 mil 891 con carrizo, bambú, palma o embarro o bajareque, madera o adobe; y mil 845 con otros materiales.
Las que cuentan con techado de losa de concreto o vigueta con bovedilla suman 671 mil 446; con palma o paja, madera o tejamanil, terrado con viguería y teja son 22 mil 689; y hay 118 mil 275 techadas con otros materiales.
En tanto, 32 mil 611 tienen piso de tierra; 358 mil 678 de cemento o firme; y 421 mil 121 de madera, mosaico u otro recubrimiento.
Desigualdad y violencia
En colonias de la capital potosina como Las Piedras, San Ángel e Industrial Aviación, existen casas donde habitan hasta seis personas en dos cuartos, informó recientemente el primer Diagnóstico de Dinámica Familiar, elaborado por el Sistema Municipal para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF).
Hay casos más graves como en El Saucito, donde habitan familias de ocho integrantes con un solo cuarto.
El estudio municipal advierte que mientras mayor es el número de familiares habitando en una sola casa, el espacio se vuelve más proclive a delitos de carácter sexual.
Para Benjamín Alva Fuentes, profesor investigador de la Facultad del Hábitat de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, la Zona Metropolitana de San Luis Potosí presenta contrastes muy evidentes, porque es una metrópoli con desarrollo y progreso, pero todavía tiene sectores donde existen hogares con piso de tierra o con un solo cuarto.
“Vemos las ciudades muy diferentes y esto lo que hace es evidenciar la desigualdad, en términos de las condiciones de vivienda que se observan en el estado. Yo creo que uno de los puntos es que tanto a nivel federal como estatal se pudieran recuperar o fortalecer estos programas para mejorar las condiciones de la vivienda”, recomienda.
Sostuvo que la vivienda, sus servicios y entorno, determina el nivel de felicidad de los inquilinos, por ello es importante si cuentan con recolección de basura, energía eléctrica o acceso a internet, como expone el Módulo de Bienestar Subjetivo del Inegi.
“Hay una variación muy amplia entre las condiciones de la vivienda, por ejemplo, en la Huasteca, en el Altiplano y por supuesto, aquí en la Zona Metropolitana, sin embargo, hay cosas que parecen raras todavía que se presenten en pleno siglo XXI, que yo ya le quiero apuntar al 2025 al primer cuarto de siglo, esas condiciones que tu observas ahí, imagínate que tú las puedes encontrar en las orillas del río Santiago”, lamentó.
Con información de: Pulso