El desdén político, la falta de presupuesto, planeación e información, carencias de personal capacitado y la poca importancia que se le da la actualización del atlas de riesgos, son algunos de los elementos que rodean a la cultura de protección civil en México y en San Luis Potosí, así lo consideró el investigador, Jorge Morán Escamilla, académico de El Colegio de San Luis, experto en desastres.
El 19 de septiembre es el Día Nacional de la Protección Civil y no es una fecha para conmemorar los sismos, sino la oportunidad para recordar que la protección civil debe estar presente en la vida cotidiana de las personas, para salvaguardar su integridad física pero también su patrimonio y para tomar conciencia de las contingencias que se pueden presentar a cada momento como deslaves, inundaciones, explosiones o los propios sismos.
Para el investigador del Programa Agua y Sociedad, la población y las autoridades no han aprendido las lecciones que han dejado algunos eventos de la historia reciente y añadió que por ejemplo, “las lluvias recientes en México y en San Luis Potosí, siguen siendo atendidas a través de una política reactiva”.
El ciudadano no se vincula con la autoridad y agregó que “no hay suficiente información, cuando se compra casa o se decide por habitar una vivienda, no se sabe cuáles son los riesgos en términos de fenómenos naturales, sismos, inundaciones, cambios en las vialidades, entre otros”.
Citó como ejemplo un reciente caso en la avenida Chapultepec en la capital potosina, en donde se cubrió con chapopote una alcantarilla porque los vehículos caían en ella como un bache y para evitarlo lo taparon, sin considerar las consecuencias en temporada de lluvias.
Atlas de riesgos
Los Atlas de Riesgos son instrumentos que contienen información sobre los territorios, los cuales deberían servir para la planeación y toma de decisiones, sin embargo, al respecto Morán Escamilla comento que se nutre con información de las unidades de protección civil de los estados, las cuales tienen condiciones desiguales en infraestructura, recursos, etc., lo que hace difícil que nutran de forma equitativa la información.
¿Por qué se dice que los desastres naturales no existen?
Reiteró que “los desastres no son naturales” sino que son los procesos sociales a través de la toma de decisiones y la falta de planeación, lo que coloca a la población en situaciones vulnerables y se expone a las personas a fenómenos naturales y sus consecuencias. Como ejemplo se refirió a la deforestación o cambios de uso de suelo. Informó que 80 por ciento de los desastres en México y el mundo son de orden hidrometeorológico, principalmente por la falta de planeación y prevención.