Marcela Loyola
Trabajadoras y trabajadores sindicalizados del Congreso del Estado preparan una protesta y paro de labores por el endurecimiento de medidas que violan sus derechos laborales por parte del presidente de la Junta de Coordinación Política (JUCOPO), diputado del PVEM Héctor Serrano Cortés y la titular de la Oficialía Mayor, la ex diputada del PVEM Dolores Eliza García Román, así como las malas condiciones de las instalaciones.
Los quejosos acusaron que, la funcionaria legislativa les ha negado el pago de días que les adeudan por cada quinquenio que tienen por antigüedad; pues le expresó que la actual Legislatura no reconocía ningún adeudo con el personal heredado por la anterior Legislatura y que partir de septiembre era “borrón y cuenta nueva”, todo por órdenes de la JUCOPO. Hay casos en que les adeudan semanas y no se las quieren pagar.
También, acusaron que la Oficial Mayor del Congreso de San Luis Potosí les canceló la prestación que tenían de usar un pase para justificar un retardo en la entrada o salida anticipada durante un día al mes, prestación que venían gozando desde hace varias legislaturas; sin embargo, a partir de ayer, fue colocado un anuncio en los checadores de entrada del personal donde la Oficialía Mayor especifica que a partir de este miércoles los pases sólo serán autorizados en casos de emergencia, pero que la petición deberá hacerse con anticipación y ser firmada por el o la coordinadora de área y el o la diputada a la que asisten.
Las y los inconformes lamentaron el endurecimiento de las medidas laborales en su contra y advirtieron que protestarán ante la JUCOPO y si es necesario se manifestarán en las sesiones del Pleno.
Además, lamentaron que el sindicato mayoritario, el SUTSGE, pese a estar enterado de estos abusos de la autoridad en el Congreso del Estado, no salen en su defensa y están más enfocados en la deteriorada salud de la lideresa Bernardina Lara Argüelles y en la posible sucesión.
Agregaron que, es injusta la situación que viven ya que tienen conocimiento que las y los diputados de la anterior Legislatura, antes de retirarse en septiembre pasado, hicieron su “año de Hidalgo” y se repartieron millones de pesos que no fueron ejercidos.
Además, denunciaron que la actual Legislatura sigue con el derroche de recursos públicos en comelitonas y pago de viáticos a diputados y asesores, mientras los baños del salón de Plenos están cada vez más deteriorados y con plafones desprendidos, además de que fueron desperdiciados los miles de pesos invertidos en el altar de muertos instalado en el Congreso edificio “Presidente Juárez”, ya que con la lluvia de anoche fue semi destruido por estar a cielo abierto.