Zaira Quevedo
El personaje más amado por todos los niños en todos los continentes sin duda es Santa Claus, también conocido como Papá Noel, tiene su raíz en un personaje histórico del siglo IV, Nicholas de Bari, quien fue reconocido por la iglesia católica gracias a su generosidad y actos de caridad, especialmente con los infantes y los pobres.
De acuerdo a la tradición cristiana nació en Anatolia, hoy Turquía, cuando una pareja devota con problemas para concebir a un hijo, pidiera fervientemente en oración por un milagro. Las súplicas fueron escuchadas, y como era de esperarse, Nicolás fue criado con especial cariño y atención, siendo hijo único de esta pareja. Sin embargo, al llegar a la adolescencia, el joven perdió a ambos padres a causa de una plaga que azotó la ciudad donde vivían, quedando así en la orfandad.
A pesar que el joven tuvo una dura vida, creció sin resentimiento de perder a su familia a tan temprana edad, el corazón de Nicolás fue empático con el sufrimiento ajeno, motivo por el cual decidió honrar a Dios.
Sus actos de caridad, así como su madurez y sabiduría, lo hicieron merecedor del nombramiento de Arzobispo de Myra, a la corta edad de 20 años. Según la Enciclopedia Británica, San Nicolás, habría muerto un seis de diciembre, alrededor del año 343.
De San Nicolás a Santa Claus. Durante la edad media, San Nicolás era representado como un clérigo de barba larga y delgado. El traje rojo con el que típicamente se le conoce, mantiene en realidad similitud con el hábito o vestuario de los obispos holandeses llamados Sinterklaas.
Es justamente a los holandeses a quienes se adjudica la llegada de la leyenda de Sinterklaas a Nueva Ámsterdam, actualmente Nueva York, de la mano de la tradición de dar regalos y dulces a los niños durante su fiesta patronal, celebrada precisamente el día de su muerte.
La apariencia actual de Santa, data principalmente del año 1863, y su origen se adjudica al dibujante Thomas Nast, ilustrador del Harpers’s Weekly, quien habría basado su representación a partir de una descripción encontrada en el poema Una visita de San Nicolás, que fue publicado por primera vez en 1823.
En 1931 la compañía Coca-Cola, fue la encargada de dar los ajustes finales al aspecto de Santa, a quien convirtió en imagen de su producto de la mano del ilustrador Haddon Sundblum, quien lo representó como un hombre corpulento de barba blanca con un vistoso traje rojo con cinturón y botas negras. Es así como salimos de la duda que la famosa refresquera no fue quien creó la imagen real de Santa Claus solo la perfeccionó.