En el último día de Ken Salazar como embajador de Estados Unidos en México, la presidenta Claudia Sheinbaum no tuvo palabras de despedida para él.
En cambio, ante las expresiones del diplomático de que no se arrepentía de nada de lo hecho durante su gestión, la mandataria mexicana recordó que a partir del año pasado dejó de haber una buena relación con el representante del gobierno de Joe Biden por dos temas en particular.
“En el último periodo hubo desencuentros con el embajador, uno de ellos fue el tema del Poder Judicial. Porque él, además, un día, lo aplaudió y otro día lo reprobó. Entonces, no sabíamos cuál era su posición. Pero además no tiene por qué opinar el embajador de Estados Unidos sobre un asunto que le compete a México” reprochó.
Sheinbaum recordó que el segundo tema, por el que el ex presidente Andrés Manuel López Obrador puso “en pausa”, su relación con Ken Salazar, fue la manera en que el narcotraficante Ismael “El Mayo” Zambada, llegó en un avión particular a Estados Unidos y quedó bajo custodia de las autoridades de ese país para ser juzgado.
“Porque más allá de la persona, el tema central es cómo fue que lo detuvieron y hasta dónde llegó la injerencia de Estados Unidos en México. Porque, cómo lo he dicho, nosotros vamos a colaborar, nos vamos a coordinar, -son nuestros vecinos, hay más de 3 mil kilómetros de frontera- en muchos temas, pero cada uno desde su soberanía. Y si nosotros tenemos algo que defender es que somos un país libre y soberano”, advirtió.
Hasta antes de esos dos episodios, Ken Salazar era visitante frecuente de Palacio Nacional. La cierta regularidad y cercanía con López Obrador llegó a ser cuestionada por políticos de su país.
En la administración de Claudia Sheinbaum, únicamente visitó una ocasión las oficinas del Jefe de Ejecutivo en México y fue para acompañar a los empresarios de su país que tuvieron un encuentro con la presidenta, quien dio a conocer que había nuevas reglas para la relación con el embajador estadounidense: no podía tener tratos directos con funcionarios federales, sino que todo debía ser a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores.
Con información de: Latinus