Marcela Loyola
Madres de familia denunciaron una serie de presuntos maltratos y comportamientos inadecuados por parte de una docente hacia varios alumnos del jardín de niños La Estrellita, entre ellos, un niño de tercer año que comenzó a presentar signos de estrés.
En el jardín de niños ubicado en la esquina de las calles Melchor Ocampo y Mariano Jiménez de esta capital potosina, la madre del menor afectado, María Fernanda Torrens Calante relató que, durante el primer año escolar su hijo asistía entusiasmado a la escuela, pero desde la segunda semana del actual ciclo, comenzó a mostrar resistencia a acudir al plantel “me decía que lo iban a regañar, que le iban a gritar, que le iban a pegar. Yo lo veía nervioso, con miedo, pero no me decía todo claramente”.
Abundó que, al hablar con la maestra, encontró una actitud evasiva y la docente desvió la conversación hacia aspectos académicos del niño, señalando que no coloreaba bien, ignorando la preocupación emocional de la madre, “no estoy hablando de lo académico, sino de cómo se siente emocionalmente, y mi hijo no estaba así”.
“Yo lo que pido es que mi hijo esté bien, que no tenga miedo de ir a la escuela. No debería ser una lucha para los niños ni para los padres. Queremos respeto, queremos empatía, y queremos un ambiente sano para nuestros hijos”, solicitó.
Otras madres reportaron actitudes similares, pues sus hijos expresaban temor hacia la maestra, algunos desde el primer día de clases, negándose a ingresar al aula, por lo que se reunieron con la directora para exponer lo que estaba ocurriendo, pero no les ayudó, “le pedimos que los cambiara de grupo, pero nos dijo que iban a ver qué cambios hacían. No hicieron nada”.
Una madre de familia del ciclo escolar anterior, también denunció que, su hija vivió una experiencia similar con la misma maestra, lo que derivó en un retraso académico importante, otras familias han manifestado su malestar de manera anónima por miedo a represalias.
El pasado 6 de octubre, presentó un escrito formal ante el Sistema Educativo Estatal Regular (SEER), solicitando el cambio de grupo para su hijo, pero no ha recibido respuesta. A la par, la directora del plantel fue retirada de su cargo días después, sin que se nombre a un nuevo titular para la dirección del plantel, dejando a la comunidad escolar sin una figura de liderazgo clara.

