La vulnerabilidad en la que se encuentran los niños y adolescentes en México ha llegado al grado de que el crimen organizado los recluta como sicarios y son usados como carne de cañón para enfrentar tanto a las autoridades como a grupos rivales.
A partir de la guerra contra el narcotráfico, durante la administración de Felipe Calderón, la violencia se convirtió en uno de los principales problemas de la infancia y, a la fecha, en promedio 3.6 niños y adolescentes son asesinados a diario, alertó Juan Martín Pérez, director de la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim).
“Tenemos ahora niños víctimas de reclutamiento (del crimen organizado), es decir, niños soldados, hubo muchas historias que se contaron el año pasado como Juanito Pistolas, entre otras, donde vimos a niños amenazando a líderes de cárteles con armas largas”, mencionó Pérez García a Sofía García y Alejandro Sánchez en El Informativo El Heraldo Fin de Semana.
El caso de Juanito Pistolas se volvió viral después de que circularan videos de este menor de edad mientras manipulaba armas largas o aparecía abordo de vehículos de una organización delictiva, luego fue abatido el 29 de agosto pasado en Tamaulipas durante un enfrentamiento con militares y policías.
Ese reclutamiento no está siendo reconocido (por las autoridades) pese a que desde 2011 se ha señalado”, reclamó.
Al adelantar parte del balance 2019 de la Redim sobre la situación de la infancia, Juan Martín Pérez mencionó que en 97 de cada 100 carpetas de investigación sobre casos en los cuales los niños son víctimas de violencia existe impunidad y sólo en 3 de cada 100 carpetas se alcanza la justicia o se continúa el proceso judicial, añadió.
Además, la Redim estimó que cada día en México hay cuatro niños y adolescentes que desaparecen.
Juan Martín Pérez, director de la Redim aseguró que el otro gran problema detectado es la invisibilización de las niñas, niños y adolescentes.
Por otra parte, el experto alertó que los problemas de este sector no son prioridad en la agenda política del gobierno federal, ni de las autoridades estatales.
Recordó que el presidente Andrés Manuel López Obrador se ausentó de las dos reuniones que ha celebrado el Sistema Nacional de Protección Integral a Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA), del cual es el presidente, a pesar de tratarse del principal mecanismo de coordinación para atenderlos.
Además, la mayoría de los gobernadores tampoco han asistido a las reuniones que se celebran a nivel local.
Como parte del diagnóstico de la Redim, el especialista Pérez García advirtió que aunque el presupuesto para la infancia se mantuvo “en términos amplios”, sí hubo recortes al presupuesto del DIF y de las procuradurías de protección a la niñez, lo que se suma a la desaparición del subsidio para estancias infantiles.
El también activista llamó al presidente López Obrador a conformar un pacto nacional junto con familias, medios de comunicación y diversos sectores relacionados con la infancia para “poner a los niños al centro del país”.
El también activista llamó al presidente López Obrador a conformar un pacto nacional junto con familias, medios de comunicación y diversos sectores relacionados con la infancia para “poner a los niños al centro del país”.
Los problemas que vive la niñez y los adolescentes no los puede resolver ningún gobierno, ninguna administración, necesitamos que participen sus familias, las sociedades, los medios, las comunidades”, sostuvo Juan Martín Pérez.
El principal cambio para terminar con la invisibilidad del sector, señaló, consiste en dejar de ver a los niños sólo como seres que son responsabilidad de las familias.
“El país firmó hace 30 años la convención de los derechos del niño que obliga a los estados a reconocerlos como personas de pleno derecho, y no les invalida para tomar decisiones en los temas que les afectan”, aclaró.
Con información de El Heraldo de México