La ciudad de manera gradual se vacía con el enclaustramiento de la población, la mayoría de las actividades económicas y sociales se perfilan a la parálisis como la mejor manera de abatir la propagación del virus Covid-19, un toque de queda por “decreto” sanitario.
El gobernador Carreras está en sintonía con las medidas federales, no hay discrepancias y se adoptan las acciones preventivas y restrictivas de interacción social y suspensión de concentraciones masivas.
Carreras ha asistido algunas de las conferencias diarias de la secretaria de Salud, Mónica Rangel, en las que se informa sobre el registro de casos confirmados y bajo sospecha.
Este miércoles se informó de cuatro personas que dieron positivo, tres casos sospechosos y se descartaron a 41; es clara la tendencia a la alza, siguen siendo de origen “importado” y pronto podría haber casos de contagio local.
Falta ver hasta dónde llega el sector privado, que mostró una insólita como poco creíble sensibilidad con el paro feminista al bajar sus cortinas y darles el día libre a sus trabajadoras con goce de sueldo.
Lo que sigue es el paro de fábricas, comercios, salvo farmacias y tiendas de comestibles; ya cerraron antros y cantinas o están en proceso, los restauranteros se resisten a pesar de que la clientela cada vez es menor; el uso del transporte colectivo ha caído en un 50 por ciento.
La oposición al gobierno federal está un punto alto, no ve acciones suficientes para enfrentar esta emergencia de salud pública; la unidad nacional, una tregua entre el Presidente AMLO y sus adversarios se ve difícil.
Las mañaneras abren con otros temas, como este día fue el fracasado aeropuerto de Texcoco y su alud de corrupción, el lunes se comenzó con la exhibición de gasolineros ladrones y careros.
El coronavirus se relega a un segundo plano y la actitud desafiante del propio AMLO que sigue con sus besos y abrazos y el rechazo al uso de gel, provoca arrebatos de opositores y periodistas, no son pocos los que desean que se contagie para acelerar su derrumbe si hacemos caso a las teorías golpistas.
SUCESIÓN INFECTADA
La sucesión en la UASLP transita con dificultades pero se ve beneficiada de la crisis sanitaria, la imposición en curso a favor del secretario general Anuar Kasis bajó de la agenda mediática, aunque no cesa la información sobre el historial de corrupción y abusos del rector saliente, Manuel Fermín Villar Rubio, y su camarilla.
Del abierto y amable director de la Facultad del Hábitat, solo queda el recuerdo. Se habla hasta de amenazas a un aspirante.