El juez de distrito de Yucatán Adrián Fernando Novelo otorgó una suspensión definitiva de las obras del Tramo 5 Sur del Tren Maya entre Playa del Carmen y Tulum, Quintana Roo, informó la organización Defendiendo el Derecho a un Medio Ambiente Sano (DMAS).
De acuerdo con la asociación, este fallo se dio en el expediente 884/2022, el cual es parte del amparo promovido por un grupo de buzos que “desean proteger la selva y el acuífero”.
“Suspenda o paralice cualquier acto que tenga como finalidad la continuación de la construcción del Tramo 5 Sur del proyecto Tren Maya, con trazo de Playa del Carmen a Tulum, Quintana Roo, de modo que no se permita la ejecución de obras relacionadas con su construcción, infraestructura, remoción o destrucción de la biodiversidad del terreno o cualquier otra actividad que implique su ejecución material”, ordena el juez al Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur).
Grupo Fórmula solicitó una postura al equipo de Fonatur al respecto de este tema y se mantiene en espera de una respuesta.
Fonatur presentó tarde la MIA del Tramo 5 Sur
Esta decisión se da una semana después de que el Fondo Nacional de Fomento al Turismo presentara la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) para el Tramo 5 Sur, casi 3 meses después de haber empezado la obra, y donde reconoce que habrá daños a la selva y riesgos de derrumbe.
El jueves 12 de mayo, un tribunal colegiado desechó las quejas presentadas por Fonatur, al consideradas infundadas, de acuerdo con la abogada de DMAS Antonella Vázquez, lo que daba la idea de que la decisión del juez sería suspender la obra.
El pasado 18 de abril, la organización DMAS informó que un juez de distrito concedió una suspensión provisional para frenar las obras del Tramo 5 sur, a cargo de un consorcio encabezado por Grupo México.
A principios de mayo, la organización informó de otra suspensión temporal concedida para frenar las obras de las dos partes del Tramo 5.
De acuerdo con la abogada de DMAS Antonella Vázquez, esta segunda suspensión reclamó el respeto a los derechos al medio ambiente, la legalidad y la certeza jurídica.
La disputa por el Tren Maya
DMAS es parte de la campaña Sélvame del Tren, integrada también por ambientalistas, activistas y famosos como Eugenio Derbez y Natalia Lafourcade, que desde marzo pasado cobró fuerza para reclamar que las obras del Tramo 5 del Tren Maya invaden la selva de Quintana Roo.
Ello luego de que se cambiara el trazo de esa parte del proyecto, que originalmente iría por la carretera federal 307 mientras que el nuevo planteamiento se diseñó unos 7 kilómetros al interior de la selva, donde no hay áreas impactadas.
Por ello, Sélvame del Tren exigió que el gobierno presentara los estudios de impacto ambiental y cumpliera con los requisitos legales para la ejecución de la obra. Hasta ahora, las dos partes del Tramo 5 no han presentado Manifestación de Impacto Ambiental.
Por ello, no se conoce los posibles daños que tendrá en el medio ambiente, entre los que DMAS señaló afectación a la flora (entre las que hay especies protegidas), fauna, así como el riesgo de hundimientos por la fragilidad del suelo y contaminación de los ríos subterráneos y cenotes.
Al respecto, Guillermo D’Christy, ambientalista de Sélvame del Tren, detalló que la mayor parte del agua potable que se consume en la zona turística y las ciudades como Cancún, Playa del Carmen o Tulum, se obtiene de estos ríos subterráneos a través de pozos.
De acuerdo con el gobierno de la 4T, el Tren Maya cuenta con un permiso provisional para su construcción sin estos requisitos; esto a partir del “decretazo”, un acuerdo presentado por el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) en noviembre pasado por el que las obras de infraestructura pueden exentar estos requisitos y tienen que recibir los permisos provisionales de manera exprés.
El Universal publicó esta semana el contenido del permiso provisional, concedido en diciembre de 2021, antes del cambio de trazo, por lo cual incluso este permiso no tendría validez al haberse otorgado para el trazo previo del Tramo 5 del Tren Maya.
El recorrido completo del Tren Maya consta de 7 tramos que pasarán por unos 1 mil 500 kilómetros en 5 entidades: Quintana Roo, Yucatán, Campeche, Chiapas y Tabasco. Los primeros 4 tramos, de Chiapas a Yucatán, cuentan con MIA; los 3 primeros con una Manifestación Regional, mientras que la del tramo 4 se presentó tarde, posterior al inicio de las obras.
En tanto que los tramos 5, 6 y 7 aún no cuentan con estos requisitos de ley. Los ambientalistas de Sélvame del Tren adelantaron a Grupo Fórmula que también buscarán proteger la reserva de la biósfera de Calakmul, en el tramo 7, de los impactos eventuales del Tren Maya.
Con información de Radiofórmula