La población mundial alcanzó las 8 mil millones de personas con el nacimiento de un niño de nombre Damián, en la República Dominicana.
Su madre dio a luz al bebe de 2.77 kilos y 52 centímetros en la maternidad Nuestra Señora de la Altagracia, Santo Domingo, la madrugada de este martes 15 de noviembre, informó durante conferencia de prensa el doctor del hospital, Jorge Arturo Jiménez.
Damaris Ferreras, la madre de 25 años, fue referida a la maternidad este lunes en la tarde y su hijo nació en la madrugada sin complicaciones.
El nacimiento, que ha dado la vuelta al mundo, ha enternecido a usuarios en redes sociales de diferentes países. A su vez, Orlando Barría, fotógrafo que presenció el evento lo calificó como único.
De acuerdo con el informe de Perspectivas de la Población Mundial de la ONU, la cantidad de personas en el mundo alcanzó las 8 mil millones este martes.
El documento del Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de Naciones Unidas (DESA), sitúa a India como el país más poblado de cara a 2030 por delante de China e indica que la población mundial podría llegar a los 8 mil 500 millones para 2030, una cifra que podría ascender a los 9 mil 700 millones en 2050 y a 10 mil 400 millones en 2080.
El secretario general de la ONU, António Guterres, calificó la cifra como un “hito histórico para el desarrollo de la humanidad”, a pesar de que el ritmo de crecimiento anual es el más lento desde los años 50 y de que las desigualdades siguen aumentando.
No obstante, expresó que se trata de un recordatorio de “la responsabilidad compartida de cuidar el planeta” y de la necesidad de reflexionar sobre “los compromisos que no se han cumplido”. En este sentido, recordó la importancia de hacer frente a crisis como la del coronavirus, la climática o los conflictos armados: “el mundo está en peligro”.
Ante la noticia, el Fondo de Población de las Naciones Unidas de la República Dominicana celebró los avances médicos y en derechos humanos, pero advirtió que existe un acceso desigual en el mundo a la atención sanitaria, a las oportunidades y a los recursos, así como una carga desigual de violencia, conflictos, pobreza, salud precaria, discriminación y “políticas coercitivas que violan los derechos reproductivos de las mujeres y niñas”.
Ante esto, hizo un llamado a invertir en mejores infraestructuras, educación, atención sanitaria y garantizar el acceso a la salud y los derechos sexuales y reproductivos, así como eliminar las barreras de género, raza, discapacidad, orientación sexual o situación migratoria que impiden acceder a servicios y oportunidades.
“Tenemos que repensar los modelos de crecimiento y desarrollo económico que han llevado al consumo excesivo y han alimentado la violencia, la explotación, la degradación medioambiental y el cambio climático y es necesario garantizar que los países más pobres —que no crearon estos problemas y, sin embargo, son los que más sufren sus efectos— tengan los recursos para desarrollar la resiliencia y el bienestar en sus crecientes poblaciones”, añadió.
Con información de: Aristegui Noticias