La Conferencia del Episcopado Mexicano expresa sus más sentidas condolencias ante la triste noticia de la muerte del Papa Emérito Benedicto XVI que ha sido llamado a la casa del Padre para entrar en su presencia.
“Esta noticia ha suscitado una profunda conmoción a toda la Iglesia por el grato recuerdo y legado que ha dejado en su Pontificado como servidor fiel, especialmente en estos últimos años, que bajo una humilde presencia de oración
contemplativa del Misterio, ha dado fortaleza al Papa Francisco para continuar la labor apostólica al frente de la misión de la Iglesia”, señalan en un comunicado.
Agregan que, como sucesor de Pedro, apóstol del Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo, condujo el timón de la barca durante su Ministerio Petrino, adentrándonos para navegar a través de una riqueza espiritual y de reflexión teológica que hemos de retomar continuamente para transformar en fuente de paz y de alegría ante las pruebas y los sufrimientos que inevitablemente forman parte de nuestro peregrinaje terrenal.