Ha llovido mucho desde el Antiguo Egipto, cuando la mosca era el símbolo que portaban los soldados condecorados por su insistencia y tenacidad. Hoy, este insecto no goza de tanta popularidad. Sí, se le reconoce su función para mantener el equilibro del planeta, sobre todo por reciclar la materia orgánica en descomposición, pero cuando pululan por casa no podemos dejar de ver estos dípteros como seres molestos y sucios, capaces incluso de transmitir enfermedades. Por suerte, existen algunos remedios caseros con los que podemos ahuyentar o eliminar las moscas.
1. BOLSAS DE AGUA
Clásico entre los trucos clásicos para espantar moscas: Llenar bolsas de plástico transparente con agua, atarlas con una cuerdecilla y colgarlas en techos, marcos de puerta, columnas o estanterías. Si este método ha llegado hasta nuestros días, por algo será. No hay evidencias científicas, pero se cree que la luz que se refleja en el agua crea un efecto visual espantoso para los superdesarrollados ojos de las moscas. También se dice que se obtienen mejores resultados si introducimos en las bolsas algunas monedas.
2. TRAMPAS CON AZÚCAR, AGUA Y VINAGRE
Empezamos por fabricar la estructura:
- Cortamos una botella de plástico unos 10 centímetros por debajo del tapón, justo cuando el envase empieza a ensancharse.
- Damos la vuelta a la sección superior -con el cuello boca abajo– para que encaje en la base de la botella; dejando el espacio justo entre la boca de la botella y el líquido preparado previamente para que las moscas pasen y acaben en la mezcla.
- Sellamos las dos secciones de la botella con cinta adhesiva.
Para preparar el líquido de la trampa, la mezcla de agua, vinagre y azúcar es muy efectiva, si bien se recomienda utilizarla en terrazas, patios y jardines debido al olor que desprende (que atrae a las moscas pero no a los humanos). Si queremos ubicar la trampa dentro de casa, una buena alternativa es calentar agua con abundante azúcar hasta que la mezcla se disuelva.
3. PAPEL ATRAPAMOSCAS
- Cortamos en tiras no muy estrechas papel de pan o una bolsa de papel.
- Hacemos un pequeño agujero en cada tira para pasar un cordel con el que colgaremos la trampa.
- En una olla calentamos a fuego medio un vaso de agua, otro de azúcar y tres cucharadas de miel.
- Removemos hasta lograr un mejunje pegajoso.
- Vertemos la mezcla en un plato e impregnamos las tiras.
- Colgamos las tiras. Y a esperar como caen como moscas.
4. PLANTAS REPELENTES DE MOSCAS
Ubicar por la casa plantas aromáticas repelentes de moscas y otros insectos es otro truco que funciona y en algunos casos, además, refrescará el ambiente e incluso nos servirá para cocinar. Algunas plantas que nos ayudarán a espantar a los dípteros:
- Citronela.
- Albahaca.
- Laurel.
- Caléndula.
- Salvia
- Menta.
- Lavanda.
- Romero.
- Ajenjo.
5. VAPORIZADOR DE VINAGRE
Atacar a las moscas con vinagre, usando un vaporizador, no las eliminará, pero si que lograremos ralentizar sus movimientos, haciendo mucho más fácil su exterminio. Es una alternativa ecológica y económica a los insecticidas.
6. CEBO DE LECHE, AZÚCAR Y PIMIENTA
Otra trampa sencilla de preparar. Basta con calentar a fuego suave durante 15 minutos medio litro de leche, cuatro cucharadas de azúcar y dos o tres de pimienta. Removemos de vez en cuando. Pasado el tiempo, añadimos la mezcla en varios platos y los dejamos repartidos estratégicamente por la casa. Las moscas no tardarán en quedarse atrapadas en el líquido.
7. LIMONES Y CLAVOS
Tan sencillo como cortar varios limones por la mitad y añadir a todas las paredes obtenidas unos cuantos clavos de olor. Ponemos las mitades por mesas, ventanas, estanterías, encimeras. Las moscas no querrán pasar por ahí.
Con información de El Mundo