La noche del viernes se vivió una noche de fiesta y pasión en la unidad deportiva municipal de Villa de Reyes, donde se disputó la gran final de la Liga Municipal de Fútbol Rápido, entre los equipos Kingsville, de la cabecera; y San Juditas, de Rosario.
El encuentro fue un espectáculo de principio a fin, con dos equipos que demostraron su calidad y entrega en la cancha recién renovada, que lució un lleno total; con la presencia de familias, amigos y aficionados, que apoyaron a sus respectivos conjuntos.
El marcador se abrió con un gol de Kingsville, que tomó la ventaja y no la soltó en todo el partido. San Juditas no se rindió y buscó el empate, pero se encontró con una defensa sólida y un portero inspirado, que detuvo varios disparos peligrosos.
Kingsville aprovechó los espacios y los contragolpes para ampliar su diferencia, con goles de todos los colores y sabores, que hicieron vibrar a la afición. San Juditas también tuvo sus momentos de brillo, y logró anotar ocho tantos, que le dieron esperanza y dignidad.
Al final, el silbatazo marcó el término del partido, con un resultado de 12-8 a favor de Kingsville, que se coronó como el campeón de la Liga Municipal de Fútbol Rápido, ante el aplauso y el reconocimiento de su digno rival, San Juditas, que se quedó con el subcampeonato.